Las tecnológicas lanzadas a la oferta pública inicial

    Hoy son muchas las startup, especialmente tecnológicas, que buscan expandir sus negocios saliendo a cotizar públicamente aunque todavía no sean rentables. El truco está en saber convencer a los inversores de que tienen futuro.

    Después de años de obtener dinero en los mercados privados, empresas de todo tipo –como Uber, Pinterest o Airbnb– se lanzan en 2019 a la pileta de los mercados públicos. Juntas, las tecnológicas que van a salir a cotizar en Bolsa antes de que termine este año han reunido ya más de US$ 50.000 millones de inversiones privadas, una cantidad casi equivalente a la capitalización de mercado de General Motors. Muchas de sus valuaciones privadas son enormes. La última valuación de Uber fue de US$ 76.000 millones y la de The We Company (anteriormente conocida como WeWork), de US$ 47.000 millones.

    Con tantos inversores privados dispuestos a aportar capital, alguien podría preguntar para qué molestarse en cotizar en Bolsa. Una de las varias razones es que una oferta pública inicial se suele interpretar como señal de madurez en el ciclo de vida de una compañía. Otra, que cotizar en el mercado público significa lograr una reputación que abre muchas puertas en el mundo financiero.

    Otra que tal vez sea más importante es que la gente que ha invertido tiempo y dinero en esas compañías siente que ha llegado el momento de recoger los frutos de sus inversiones. Una OPI (sigla para Oferta Pública Inicial) es el principal mecanismo por el cual los capitalistas de riesgo y los empleados con acciones de la compañía convierten sus papeles en riqueza. También empujando esta ola de salidas a la bolsa están las preocupaciones referidas a la posibilidad de que la economía estadounidense se esté aproximando a otra recesión. En ese caso, la medida más acertada –piensan– es adelantársele al mercado.

    Lo que sigue es una lista de algunas de las principales OPI del año.

     

    Airbnb

     

    CEO: Brian Chesky.

    Valuación privada: US$ 31.000 millones.

    Objetivo de valuación en la Oferta Pública Inicial: desconocido

    Principales accionistas: Brian Chesky, Joe Gebbia, Nathan Blecharczyk, Andreessen Horowitz, Sequoia Capital.

     

    Fundada en 2008, Airbnb convirtió el negocio de alquilar a turistas un cuarto o una vivienda completa en un fenómeno global. La compañía lleva recaudados hasta la fecha unos US$ 4.400 millones y su última valuación le adjudica US$ 31.000 millones. El formato no tradicional podría funcionarle a Airbnb porque tiene un fuerte reconocimiento de marca y, luego de dos años de registrar rentabilidad la compañía tiene menos necesidad de reunir fondos adicionales. Lo que Airbnb necesita es dar a sus empleados la posibilidad de vender sus acciones, algo que muchos desean.

    Uno de los riesgos que corre Airbnb a medida que se acerca a su debut público es el estatus legal de sus alquileres de corto plazo. La compañía pasó casi diez años combatiendo los esfuerzos por regular ese modelo informal de alquilar casas, o “compartir casas”. Adoptó una actitud más conciliatoria a fines de 2016 luego de que algunos de sus más grandes mercados –Nueva York, San Francisco, Berlín y Barcelona– comenzaron a aplicar grandes multas a sitios de alquiler de viviendas temporarias que operaban en forma ilegal.

    La compañía mencionó los conflictos regulatorios como un riesgo para los inversores en los esfuerzos por reunir capital privado y es probable que agite ese mismo riesgo a los probables accionistas que resulten de la OPI. A medida que se iba desacelerando el crecimiento del alquiler de viviendas temporarias, Airbnb buscó expandirse y convertirse en una firma de viajes completa, con todo tipo de servicios que incluían excursiones guiadas y reservaciones en restaurantes.

    Fundada en 2008, Airbnb convirtió el negocio de alquilar un cuarto o una vivienda a turistas en un fenómeno global. La compañía lleva recaudados hasta la fecha unos US$ 4.400 millones y su última valuación le adjudica US$ 31.000 millones. El formato no tradicional podría funcionarle a Airbnb porque tiene un fuerte reconocimiento de marca y, luego de dos años de registrar rentabilidad la compañía tiene menos necesidad de reunir fondos adicionales. Lo que Airbnb necesita es dar a sus empleados una posibilidad de vender sus acciones, algo que muchos desean.

    Uno de los riesgos que corre Airbnb a medida que se acerca a su debut público es el status legal de sus alquileres de corto plazo. La compañía pasó casi diez años combatiendo los esfuerzos por regular ese modelo informal de alquiler de casas, o “compartir casas”. Adoptó una actitud más conciliatoria a fines de 2016 luego de que algunos de sus más grandes mercados –Nueva York, San Francisco, Berlín y Barcelona, por mencionar algunos– comenzaron a aplicar grandes multas a sitios de alquiler de viviendas temporarias que operaban en forma ilegal. La compañía mencionó los conflictos regulatorios como un riesgo para los inversores en los esfuerzos por reunir capital privado y es probable que agite el mismo riesgo a los probables accionistas que resulten de la OPI. A medida que se iba desacelerando el crecimiento del alquiler de viviendas temporarias, Airbnb buscó expandirse y convertirse en una firma de viajes completa, con todo tipo de servicios que incluían excursiones guiadas y reservaciones en restaurantes.

     

    Lyft

     

    CEO y cofundador: Logan Green.

    Valuación privada: US$15.000 millones.

    Objetivo de valuación en la Oferta Pública Inicial: US$ 24.000 millones.

    Principales accionistas: Rakuten, General Motors, Fidelity, Andreessen Horowitz, Alphabet, Ann Miura-Ko, Sean Aggarwal.

     

    Lyft opera solo en Estados Unidos, donde siempre ha ocupado el segundo lugar después de Uber. Al comienzo se posicionó como la alternativa “buena” frente a Uber. Debutó en el Nasdaq el 29 de marzo, ganándole a su rival en los mercados públicos. Vendió 19 millones de acciones durante los primeros 15 minutos de negociación, lo que hizo que el precio de la acción se disparara un 20%, a US$ 72. La capitalización de mercado de Lyft tras su salida a Bolsa se situó en US$ 25.000 millones. Sin embargo, las acciones cayeron alrededor de un 12% durante el segundo día de negociación.

    El debut fue una buena señal para otras startups tecnológicas hasta ahora deficitarias que proyectan salir a la Bolsa en 2019, Lyft perdió US$ 911 millones en ingresos en 2019. Aparentemente, los ejecutivos de la compañía han dicho a los inversores que sería rentable ya si no estuviera invirtiendo en otros modos de transporte, como las motonetas eléctricas.

     

    Pinterest

     

    CEO y cofundador: Benjamin Silbermann.

    Valuación privada: US$12.000 millones.

    Objetivo de valuación en la Oferta Pública Inicial: US$ 9.000 millones.

    Principales accionistas: Benjamin Silbermann, Bessemer Venture Partners, FirstMark Capital, Andreessen Horowitz, Fidelity, Paul Sciarra, Valiant.

     

    Pinterest es una plataforma para diseños e ideas, el equivalente online de la cartelera donde se pinchaban fotos recortadas de revistas. No es exactamente una red social porque no fomenta la charla entre los usuarios como Facebook, Instagram y Twitter. Los usuarios pueden mirar las imágenes y guardarlas en carteleras personales para usarlas en el futuro.

    Pinterest fue fundada en 2009 por Ben Silbermann, Evan Sharp, y Paul Sciarra. Se monetiza principalmente con avisos. La compañía todavía no es rentable y arroja una pérdida neta de US$ 63 millones en 2018. Tiene alrededor de 265 millones de usuarios activos mensuales desde el último trimestre de 2018. El usuario típico es una mamá millennial con ingresos superiores al promedio en Estados Unidos, aunque últimamente su mayor crecimiento proviene de otros países. Antes de lanzarse a una OPI la compañía trató de distanciarse de las redes sociales, que hacen esfuerzos por ver cómo moderan el contenido posteado en sus plataformas. En febrero tomó la audaz medida de bloquear todos los resultados de búsquedas relacionadas con vacunación para detener la difusión de la desinformación en su sitio.

     

    Slack

     

    CEO: Stewart Butterfield.

    Valuación privada: US$ 7.100 millones.

    Objetivo de valuación en la Oferta Pública Inicial: Desconocido.

    Principales accionistas: Andreessen Horowitz, Accel, GV, IVP, Kleiner Perkins, Social Capital.

     

    Slack es un programa de mensajería en el trabajo que aspira a reemplazar el e-mail. La interfaz se conoce por sus colores brillantes, diseño extravagante y notificaciones nada convencionales como mostrar cuando “varias personas están escribiendo”. El programa se ha ganado simpatías y popularidad en entornos empresariales. La compañía es favorita entre los capitalistas de riesgo, con más de US$ 1.000 millones en financiamiento y una valuación de más de US$ 7.000 millones. Desde principios de 2019 Slack tiene más de 10 millones de usuarios activos y 85.000 clientes pagos.

    Proyecta completar una salida al mercado en la que los inversores actuales puedan vender sus acciones pero no crear capital nuevo como suele ocurrir durante una OPI típica. Los lanzamientos directos no ayudan a las compañías a reunir capital como otras ofertas públicas iniciales, pero son una buena opción para las que quieren salir a la Bolsa principalmente para ayudar a sus empleados a hacerse con dinero. Slack eligió para su debut la Bolsa de Nueva York, la misma que eligió Spotify.

     

    Uber

     

    CEO: Dara Khosrowshahi.

    Valuación privada: US$ 76.000 millones

    Objetivo de valuación en la Oferta Pública Inicial: US$ 120.000 millones.

    Principales accionistas: Softbank, Benchmark, Saudi Public Investment Fund, Travis Kalanick, cofundador y ex CEO; Garrett Camp, cofundador.

     

    Uber es una compañía tecnológica de transporte que opera en todo el globo. Tiene también un importante negocio de entrega de alimentos a domicilio –UberEats– y un esfuerzo de investigación en autos sin conductor. La compañía contrata conductores independientes –o personas para entregas de comidas– quienes facilitan sus servicios para los clientes. La compañía sostiene que no es un servicio de taxis, sino simplemente una plataforma que conecta los dos extremos de un mercado. Travis Kalanick, cofundador y ex CEO, debió renunciar en 2017 por acusaciones de acoso sexual en la compañía. También fue demandado por Benchmark, una firma de capital de riesgo y gran inversor en Uber.

    La actual CEO de la compañía, Dara Khosrowshahi, asumió en septiembre 2017 con el objetivo de hacer la primera venta pública de acciones en 2019. Para prepararse para su debut, solucionó primero algunos asuntos legales, arregló con los reguladores y limpió las prácticas contables. Tiene inversiones en bicicletas eléctricas y motonetas, una plataforma de camiones y un incipiente negocio de personal on-demand. La compañía perdió US$870 millones con ingresos de US$ 3.000 millones en el último trimestre de 2018.

     

    The We Company

     

    CEO: Adam Neumann.

    Valuación privada: US$ 47.000 millones.

    Objetivo de valuación en la Oferta Pública Inicial: Desconocido.

    Principales accionistas: Softbank, Benchmark, T. Rowe Price, Fidelity, JPMorgan Chase, Goldman Sachs, Harvard Management Company.

    The We Company, anteriormente conocida como WeWork, es una compañía de alquiler de espacios premium para oficinas, que atiende a startups y millennials con amenities como agua frutada y cerveza tirada. La compañía opera también WeLive, que alquila y administra departamentos de vivienda privada, y WeGrow, un negocio que actualmente incluye una escuela primaria y una academia de codificación.

    (La operación central de alquiler de oficinas se sigue llamando WeWork.) La compañía no es dueña de sus edificios de oficinas, pero se los alquila a largo plazo a sus dueños y luego los subcontrata a clientes por términos de corta duración.

    Fundada en 2010, The We Company ha reunido US$ 8.400 millones hasta la fecha con una valuación de US$ 47.000 millones. Estuvo en conversaciones con el SoftBank para reunir US$ 16.000 millones en una operación que habría dado al conglomerado tecnológico japonés la posesión de la mayoría de WeWork, pero Softbank desechó el plan en enero y decidió invertir solo US$ 2.000 millones. WeWork perdió US$ 1.900 millones en enero duplicando su pérdida del año anterior; los ingresos también se duplicaron con creces a US$ 1.800 millones. La compañía dice tener más de 400.000 clientes, que llama miembros, desde diciembre 2018, aunque su tasa de ocupación cayó a 80% de 84% en el tercer trimestre.