<p>Una revisión hecha en Estados Unidos del contenido nutricional del pochoclo que venden en las salas de cine revela una alarmante cantidad de grasa, sal y calorías aun en las porciones más chicas. El estudio, realizado por el <em>Center for Science in the Public Interest,</em> analizó el “<em>popcorn</em>” en tres cadenas de cines y detalló el contenido de todas las porciones ofrecidas. <br />
<br />
Un balde grande en Regal Cinemas, por ejemplo, contiene 20 tazas de maíz y 1.200 calorías, 980 miligramos de sodio y 60 gramos de grasa saturada. Si se le agrega una cucharada de manteca tendrá 130 calorías más. <br />
La porción mediana que se vende en bolsa, contiene la misma cantidad que la grande. E incluso la pequeña tiene 670 calorías, 550 miligramos de sodio y 24 gramos de grasa saturada.</p>
<p>Estos resultados van a sorprender a todos aquellos que eligen el pochoclo porque creen que es relativamente seguro. En realidad, Las palomitas comunes, infladas en aire son bajas en calorías y libres de grasa saturada. Pero las que venden en los cines se inflan en aceite, muchas veces aceite de coco, que es 90% grasa saturada. Si se le agrega sal a las porciones enormes, el alimento que una vez fue saludable se convierte en peligroso.</p>
<p>“El tema aquí es la cantidad,” dice Marion Nestle, profesora de nutrición en la Universidad de Nueva Cork. “Uno de esos baldes grandes tiene las tres cuartas partes de las calorías de todo un día.”</p>
<p>Hasta el más inofensivo pochoclo estudiado, una porción pequeña con 6 tazas de maíz, tenía 370 calorías, suficiente para compartir con una amigo y comer de a un grano por vez para hacerlo durar toda la película. “Si sólo se comieran dos tazas, no importaría demasiado,” dijo Dr. Nestle.</p>
<p>La tercera cadena de cines estudiada, Cinemark, salió un poco mejor que sus competidoras porque infla el maíz en aceite de canola no hidrogenado. Allí el balde grande tiene el equivalente a 17 tazas de maíz con 910 calorías y 4 gramos de grasa saturada, pero 1.500 miligramos de sodio, caso lo suficiente para todo un día.</p>
<p>La mejor manera de hacer que el pochocho sea saludable es no agregarle sal. Pero mejor aun sería mirar la película sin comer nada. <br />
</p>
Un fantasma detrás del pochoclo
El pochoclo que venden en los cines tiene una cantidad alarmante de grasa, sal y calorías. Sentarse en la oscuridad del cine compartiendo con amigos un balde de palomitas de maíz suena atractivo para un sábado a la noche, pero no es inofensivo.