Millones de niños desnutridos, víctimas de las vastas inundaciones en el subcontinente indio, son vulnerables a todo tipo de enfermedades. Otra forma del efecto invernadero -explican organizaciones no gubernamentales- pueden ser los tres brotes de aftosa registrados en el sur de en Inglaterra. Ahora, se suman un tornado en Brooklyn y el anegamientos del subterráneo en Manhattan.
El desastre en Asia meridional amenaza a Ceilán y Birmania, dado que también en esos lugares las inundaciones no tienen antecedentes en muchos años. Por las dudas, Tailandia, Malasia, Filipinas e Indonesia han adoptado precauciones.
Mientras tanto, cientos de brigadas UNICEF se despliegan para vacunar, inmunizar e hidratar bebés y niños. Las operaciones se centran en el este del estado de Bihar (donde reina una pobreza extrema), Bengala occidental y Bangladesh. También se busca rescatar o asistir a gente que se ha refugiado en lo alto de los árboles, en áreas boscosas alrededor del golfo de Bengala.
Una combinación de aguaceros intermitentes –producidos por los monzones estivales- y temperaturas sobre los 45 grados centígrados expone a los estamentos más jóvenes y más viejos a infecciones oportunistas, diarreas, picaduras de insectos y deshidratación.
Ya han unos treinta millones de afectados en toda India, de los cuales diez millones sólo en Bihar. Pero, desde anoche, hay emergencias en Orissa (este de India) y Gujarat, en el extremo oeste. En Bangladesh, los afectados pasan de veinte millones. Lejos de ahí, en el norte de Italia, se desencadenaban tormentas severas sobre Florencia, Milán y Pisa.
Millones de niños desnutridos, víctimas de las vastas inundaciones en el subcontinente indio, son vulnerables a todo tipo de enfermedades. Otra forma del efecto invernadero -explican organizaciones no gubernamentales- pueden ser los tres brotes de aftosa registrados en el sur de en Inglaterra. Ahora, se suman un tornado en Brooklyn y el anegamientos del subterráneo en Manhattan.
El desastre en Asia meridional amenaza a Ceilán y Birmania, dado que también en esos lugares las inundaciones no tienen antecedentes en muchos años. Por las dudas, Tailandia, Malasia, Filipinas e Indonesia han adoptado precauciones.
Mientras tanto, cientos de brigadas UNICEF se despliegan para vacunar, inmunizar e hidratar bebés y niños. Las operaciones se centran en el este del estado de Bihar (donde reina una pobreza extrema), Bengala occidental y Bangladesh. También se busca rescatar o asistir a gente que se ha refugiado en lo alto de los árboles, en áreas boscosas alrededor del golfo de Bengala.
Una combinación de aguaceros intermitentes –producidos por los monzones estivales- y temperaturas sobre los 45 grados centígrados expone a los estamentos más jóvenes y más viejos a infecciones oportunistas, diarreas, picaduras de insectos y deshidratación.
Ya han unos treinta millones de afectados en toda India, de los cuales diez millones sólo en Bihar. Pero, desde anoche, hay emergencias en Orissa (este de India) y Gujarat, en el extremo oeste. En Bangladesh, los afectados pasan de veinte millones. Lejos de ahí, en el norte de Italia, se desencadenaban tormentas severas sobre Florencia, Milán y Pisa.