Ya en marzo, Mario Monti –miembro de la CE- había logrado que su país efectuara correcciones al “salvataje”. A cambio, dictaminó que el gobierno de Silvio Berlusconi no estaba otorgando asistencia estatal directa a los clubes en rojo. Pero falta que el decreto se conforme a las normas sobre balances financieros adoptadas por la Unión Europea.
Éstas no son otras que las pautas contables internacionales aceptadas (IAS, por “internationally accepted standards”). Esta semana, el holandés Frits Bolkenstein –comisionado de mercados bursátiles y financieros- dictaminó que “el rescate de clubes italiano infringe las normas de la UE y no puede aceptarse”.
Por ende, la CE reanuda el procedimiento preventivo por “transgresiones al digesto de derecho comunitario”. Así, si Roma no cumple con las exigencias de la CE en dos meses, las actuaciones pasan a la justicia comunitaria donde, claro, el litigo puede llevar largo tiempo.
La novedad no podía caerle a Berlusconi en peor momento. Amén de primer ministro, interino de Economía y dueño del mayor aparato mediático italiano (una de cuyas principales fuentes de ingresos es el fútbol), el Cavaliere controla el Inter. Justamente, este club ha disminuido su déficit “milagrosamente” de € 304,8 a 17,4 millones (94,3%), gracias al oportuno decreto. El Roma lo hizo de € 224,8 a 104,8 millones (53,7%), el Parma de 228,5 a 77 millones (66,3%), el Milan de 247,3 a 29,5 millones (88%) y el Lazio de 313,5 a 121,9 millones (61,1%).
Ya en marzo, Mario Monti –miembro de la CE- había logrado que su país efectuara correcciones al “salvataje”. A cambio, dictaminó que el gobierno de Silvio Berlusconi no estaba otorgando asistencia estatal directa a los clubes en rojo. Pero falta que el decreto se conforme a las normas sobre balances financieros adoptadas por la Unión Europea.
Éstas no son otras que las pautas contables internacionales aceptadas (IAS, por “internationally accepted standards”). Esta semana, el holandés Frits Bolkenstein –comisionado de mercados bursátiles y financieros- dictaminó que “el rescate de clubes italiano infringe las normas de la UE y no puede aceptarse”.
Por ende, la CE reanuda el procedimiento preventivo por “transgresiones al digesto de derecho comunitario”. Así, si Roma no cumple con las exigencias de la CE en dos meses, las actuaciones pasan a la justicia comunitaria donde, claro, el litigo puede llevar largo tiempo.
La novedad no podía caerle a Berlusconi en peor momento. Amén de primer ministro, interino de Economía y dueño del mayor aparato mediático italiano (una de cuyas principales fuentes de ingresos es el fútbol), el Cavaliere controla el Inter. Justamente, este club ha disminuido su déficit “milagrosamente” de € 304,8 a 17,4 millones (94,3%), gracias al oportuno decreto. El Roma lo hizo de € 224,8 a 104,8 millones (53,7%), el Parma de 228,5 a 77 millones (66,3%), el Milan de 247,3 a 29,5 millones (88%) y el Lazio de 313,5 a 121,9 millones (61,1%).