El rey saudita King Salman bin Abdulaziz llevó un séquito de 1.500 personas y una escalera mecánica dorada además de sus propias alfombras a su visita oficial a Rusia.
El líder de 81 años salió de su avión y bajó por una escalera mecánica especial que lo acompaña en sus viajes. Pero esta vez algo anduvo mal, se detuvo y el rey tuvo que bajar los escalones desde la mitad. Una caravana interminable de autos acompañó su viaje a la ciudad. Flanqueado por autos de la policía rusa.
En esta las primera visita de un monarca saudita a Rusia, ambos países lograron un acuerdo sobre venta de armas yn analizaron formas de seguir cooperando en la estabilización del mercado petrolero. Las mecánica de los traslados del monarca árabe es muy particular. Como ocurre cada vez que sale de su país, en este caso un avión viaja diariamente entre Riyadh y Moscow para transportar provisiones. Una pesonas cercana a la comitiva informa que lleva 800 kg de alimentos. Miembros del séquito también reemplazaron a algunos de los empleados del hotel, que son los que conocen exactamente cómo le gusta el café al rey, por ejemplo. El Rey Salman, quien se hospeda en el hotel Four Seasons, también llevó muebles propios.
El gobierno saudita reservó dos hoteles completos para la visita a Moscú: el Ritz Carlton y el Four Seasons. Este último tuvo que pedir a algunos huéspedes que cancelaran sus reservas para tener espacio suficiente y hasta tuvo que trasladar a quienes viven en el hotel en forma permanente.
Los presidentes de Estados Unidos también viajan con grandes séquitos, que incluyen liusinas a prueba de balas y una fuerza del Servicio Secreto y a veces también reservan hoteles enteros. El presidente Barck Obama se hospedó en el Ritz en Moscú durante su visita en 2009 y el Presidente Donald Trump también se hospedó allí en 2013 para el concurso de Mis Universo de su propiedad.
Reservar dos hoteles completos para esta visita hasta el 8 de octubre puede llegar a costar US$ 3 millones, sin incluir lo que gaste la delegación en servicios, restaurantes y tratamienbtos de spa, dijo Vadim Prasov, vicepresidente de la Federacion de Restauranteurs y Hoteleros de Rusia.