En el mundo de los juegos online ha nacido un fenómeno. Se llama Minecraft y no se parece a ningún juego anterior. Minecraft, según lo define Anan Ramachandran en Business Today, es como un Lego combinado con Robinson Crusoe combinado con McGyver. Es difícil describirlo, dice, sin hacerlo parecer una estupidez. Pero hace el intento y dice así:
Comienzo solo en una isla desierta. Usando nada más que las manos, empiezo a juntar materiales como barro, arena y madera. Luego hago herramientas básicas como picos, palas y hachas para reunir materiales más fuertes como piedra y carbón. Pero tengo que apurarme y construir un refugio rápido porque pronto llegará la noche y en la noche vienen los monstruos. Tendré que pasar la noche entera espantando arañas, esqueletos, zombies y una variedad de bichos que tienen un solo objetivo: acabar con mi vida.
La primera noche es poco heroica, me la paso muerto de miedo en un pequeño agujero que no mismo he construido, con la sola compañía de la luz de una pequeña antorcha (si es que me las ingenié para hacerme una). Pronto llega el día y salgo a explorar nuevamente: cazar, recolectar, construir y sobrevivir. El mundo Minecraft está formado por bloques pixelados. Los árboles están hechos de cubos. Las rocas están hechas de cubos. Las nubes están hechas de cubos, el sol y la luna están hechos de cubos. Hasta los chanchos están hechos de cubos.
La magia de Minecraft está en que el mundo es virtualmente infinito porque se va generando, lo que quiere decir que se construye a sí mismo a medida que lo explore. Nunca me quedo sin mundo. Y una vez que paso la etapa inicial y obtengo armas de acero para manejar a los monstruos, estoy en condiciones de comenzar a construir. Y eso sí que es divertido. Puedo hacer todo tipo de herramientas, armas, máquinas y materiales y usarlos en construcciones de ladrillos que sólo están limitadas por la imaginación. Puedo construir castillos con tores que llegan al cielo, fuertes que se incrustan profundamente en las montañas, pueblos enteros con casitas de piedra y madera., lo que sea.
Minecraft apela directamente a la necesidad humana de expresarse mediante juego creativo. Es más que un jueg , es como un inmenso mundo de lego virtual que puedo desarmar y volver a armar, bloque a bloque , cuando quiero. Si eso se combina con la innata alegría de descubrir que ofrece un mundo ilimitado y cientos de maneras de crear cosas nuevas, tenemos algo que prácticamente todo el mundo disfruta. Minecraft ha vendido más de tres millones de copias y todavía está en etapa beta.
