Las parejas británicas que llevan año y medio esperando realizar la boda de sus sueños reciben con alegría la decisión del Primer Ministro de al menos levantar – respetando las restricciones del distanciamiento social – la restricción de 30 invitados como máximo en casamientos y recepciones. Se mantiene, sin embargo, la exigencia de usar tapabocas si la reunión es en interiores. Pero las restricciones a la diversión van a afectar.
Limitado número de invitados, nada de bailar en interiores y tampoco en exteriores y solamente la comida que se lleva servida a la mesa. La recomendación del tapabocas podría resultar divertida pues admite la posibilidad de estampar leyendas o fotos alusivas sobre la tela.
Lo que ocurre es que las restricciones van a seguir afectando a muchos que esperaban el 21 de junio para ver levantadas todas las restricciones a las celebraciones. Todavía no se puede cantar, no se puede bailar en interiores y el bandejeo está prohibido. Se come solo la comida que se sirve en las mesas.
Los salones de fiestas deben eliminar la pista de baile y solo se permite que los novios bailen la primera y –única canción de la fiesta.
Cuando la fiesta se realiza en lugares privados, las reglamentaciones son un poco más vagas. Bailar afuera no está prohibido pero “no se recomienda”.
En la ciudad de Buenos Aires en 2020 hubo, por primera vez, más divorcios que casamientos. Esto es también consecuencia del cierre de Registros Civiles entre los meses de abril y septiembre de 2020, cierre que provocó la postergación forzada de los casamientos. En general, en todo el país, crecieron las bodas íntimas al aire libre, las bodas pequeñas en el patio de la casa, las bodas en casa y las bodas muy económicas.