Barbie presentó el 11 de noviembre de 2025 en Madrid un video exclusivo protagonizado por la modelo y actriz Laura Sánchez, embajadora de la muñeca Barbie con diabetes tipo 1. La iniciativa se realiza con motivo del Día Mundial de la Diabetes, que se celebra el 14 de noviembre, y busca visibilizar esta enfermedad y su impacto en millones de personas.
En el video, grabado durante la sesión de fotos oficial de la campaña, Laura Sánchez relata su experiencia tras el diagnóstico y reflexiona sobre el valor de la representación en el juego infantil. La modelo afirma: “Cuando Barbie me propuso unirme a esta iniciativa, pensé qué gran labor, qué orgullo y qué ilusión que las niñas que tienen diabetes puedan verse reflejadas en su muñeca. Es una celebración de la empatía, la diversidad y la inclusión desde la infancia.”
A lo largo de la pieza, Sánchez profundiza en el proceso de adaptación y la importancia de normalizar la diabetes tipo 1, indicando: “La diabetes está conmigo desde hace muchos años, y al principio fue duro, porque no sabes cómo te va a afectar, pero al final aprendes a vivir con ella, te conoces mejor y te das cuenta de que no te define, que puedes seguir haciendo todo lo que te propongas.” Además, destaca el rol educativo del juego y la relevancia de la inclusión: “Barbie siempre ha sido un referente de sueños, de posibilidades… Y ahora también muestra realidades. Que haya una muñeca con diabetes significa mucho, porque las niñas pueden jugar y verse reflejadas, entender que esto también forma parte de la vida y que no pasa nada.”
La muñeca con diabetes tipo 1 se integra a la línea Barbie Fashionistas, que cuenta con más de 175 modelos orientados a reflejar cuerpos diversos, tonos de piel, condiciones médicas y discapacidades físicas. Según informó la compañía, el proyecto se realiza en colaboración con la Fundación DiabetesCERO para impulsar la investigación hacia la cura de la diabetes tipo 1 y fomentar su normalización.
La diabetes tipo 1 es una enfermedad autoinmune que afecta a cerca de 9 millones de personas a nivel global. Esta condición implica la dependencia de tratamiento con insulina y el riesgo de complicaciones, tanto en la infancia como en la adultez, sin relación con la dieta o el estilo de vida. Actualmente, no existe cura para la diabetes tipo 1.
“Los límites los ponemos nosotros, no la enfermedad”, expresó Laura Sánchez en el marco de la campaña.












