Desde el momento en que los científicos comenzaron a decodificar el genoma humano en 1990, los médicos comenzaron as hablar de la “medicina de precisión”, un modelo que propone la personalización de los tratamientos , o sea que todas las decisiones médicas, prácticas y productos se hacen a la medida de cada paciente. Una revolución que para el cáncer — una palabra que describe una enorme cantidad de enfermedades causadas por infinidad de mutaciones — es esperada desde hace mucho tiempo.
Hoy, 14 años después de completado el experimento del genoma, algunos científicos anuncian que la medicina de precisión ya llegó. Hay toda una generación de drogas personalizables que podrían reemplazar a la quimioterapia como tratamiento estándar, ahorrándole a millones de personas ese método tan brutal que ataca células sanas junto a las cancerosas.
Las teorías han cambiado. Hoy, más que interesarse por dónde se ubicó el primer tumor, importan los rasgos moleculares. La biología es más importante que la anatomía.
En mayo recibió aprobación el primer medicamento oncológico para un rasgo genético específico cualquiera sea el lugar donde apareció. Se llama Keytruda y lo desarrolló Merck. Se puede usar con cualquier paciente de cáncer que reúna determinadas características genéticas.
En 2018 se espera que parezca otro medicamento “pan-cancerígeno” (para todos los tipos de cáncer) cuando el grupo de biotecnología Loxo Oncology consiga la aprobación de su droga, que ataca un defecto genético muy raro pero que se encuentra en casi todos los tipos de tumores.
La transición a este nuevo método de tratar el cáncer puede ser posible en parte por las tecnologías que rápidamente analizan los tumores buscando claves genéticas que llaman “biomarcadores” permitiendo así a los médicos dar al paciente la droga o el tratamiento que tiene más probabilidades de funcionar.
Muchas de estas innovaciones llegan, por ahora, a precios exorbitantes, lo cual preocupa a las prestadoras de salud, que son las que cargan con los costos en un momento en que la población vive cada vez más años.