Twitter anunció ayer que está realizando una profunda revisión de sus cuentas verificadas con idea de quitar la verificación a aquellas que no adhieran a sus nuevas políticas.
Los nuevos lineamientos para cuentas verificadas dicen que “la compañía se reserva el derecho de retirar la verificación en cualquier momento y sin previo aviso” y que la remoción podría ocurrir por acciones tales como “confundir a la gente con nombres falsos, fomentar el lenguaje del odio, fomentar la violencia o acosar a los demás.
Con esta política Twitter intenta aplacar las críticas que desde hace tiempo se le hacen por no atacar debidamente el lenguaje del odio en su plataforma.