Luego de analizar los argumentos de Estados Unidos acerca de la necesidad de prohibir los servicios 5G de Huawei por peligro de espionaje Gran Bretaña decidió el riesgo – si es que existe – es manejable. Lo mismo hicieron ya otros países de Europa occidental.
El National Cyber Security Centre de Gran Bretaña concluyó que hay formas de contener los riesgos de usar Huawei en las futuras redes ultra-rápidas 5G. Esta fue la decisión a pesar de los renovados esfuerzos de Estados Unidos por persuadir a otros países de que prohiban a Huawei de sus redes con el afgumento que China la comunicación 5G va a ser tan rápida, y tiene tantas aplicaciones militares, que el riesgo de utilizar equipos chinos de telecomunicaciones es demasiado alto. Y recalca ques, aunque todavía no hay evidencia concreta, Huawei podría usar actualizaciones de software maligno para facilitar el espionaje.
Australia y Nueva Zelanda ya prohibieron el año pasado los equipos de Huawei. Francia y alemania aconsejan cautela, pero hasta ahora no han dado señales de que piensen prohibir a la compañía china.
