Renunció el presidente de CTC Chile

Se trata de Javier Aguirre, quien el pasado jueves (8 de febrero) había expresado la decisión de dejar su puesto de manera informal. La elección fue aceptada unánimemente por los directores de la empresa local.

1 marzo, 2001

(EFE).- El presidente de Telefónica CTC Chile, Javier Aguirre, presentó ayer (miércoles 28) su renuncia al frente de esta filial de la multinacional Telefónica España, según informó ayer la compañía.

En una reunión del directorio celebrada este miércoles, Aguirre Nogués oficializó su renuncia “irrevocable” a la presidencia de la compañía de telefonía más importante del país y que había presentado el pasado 8 de febrero de manera informal.

La dimisión del alto ejecutivo fue aceptada unánimemente por los directores de la empresa local, quienes designaron ayer interinamente en su puesto al hasta hace poco director suplente de Telefónica CTC Chile, Antonio Viana-Baptista.

Al dejar oficialmente la dirección de la operadora de telefonía, Javier Aguirre manifestó que “es preocupante el daño que está causando la regulación del sector en la cuenta de resultados de la empresa”.

La decisión del alto ejecutivo se produce pocos días después de que la compañía hiciera público el balance del pasado ejercicio, que por segundo año consecutivo registró fuertes pérdidas operacionales.

En 2000, Telefónica CTC Chile perdió US$ 199 millones, circunstancia que “se atribuye fundamentalmente al decreto que fija las tarifas que rigen el mercado local de telecomunicaciones”.

El impacto de este decreto supuso -a juicio de Javier Aguirre- que la filial de Telefónica España registre US$ 200 millones menos de ingresos anuales, a los que suma “una pérdida de 87 millones en el negocio de telefonía móvil”.

Por eso Aguirre, quien dimitió aduciendo “razones personales”, advirtió de que es necesario modificar algunos aspectos de la regulación del mercado de telecomunicaciones, porque “si no el patrimonio Telefónica Chile seguirá siendo gravemente afectado”.

Recientemente, la compañía de telefonía presentó a la Comisión Antimonopolios una solicitud para la liberalización de tarifas, “la que, de ser aceptada, permitirá que la empresa tenga una importante recuperación de sus resultados”, precisó el directivo.

Desde 1999, Telefónica CTC Chile viene denunciando que, a consecuencia del decreto que fija las tarifas de acceso de las otras compañías a su infraestructura de telecomunicaciones local, las operaciones de la empresa en Chile se están viendo gravemente dañadas.

“Somos una de las empresas más eficientes de la industria de las telecomunicaciones, y curiosamente tenemos un volumen de pérdidas considerable que se debe principalmente a un inadecuado decreto”, declaró Javier Aguirre el pasado 6 de febrero al dar a conocer el balance anual de la compañía.

A pesar de esta situación, ayer manifestó que confía en que las instituciones y el Gobierno chileno acojan los reclamos de la empresa, lo cuales, según precisó, “son legítimos”.

La renuncia de Aguirre se hace extensiva a los cargos que ocupaba como presidente de las filiales Telefónica Perú, Telefónica Móvil, Telefónica Mundo, Telefónica Empresas, Telefónica Negocios, Telefónica Equipos, Publiguías, Istel y la gerencia de Telefónica Internacional Chile.

Javier Aguirre, licenciado en Ciencias Económicas por la Universidad Autónoma de Madrid y en Finanzas Internacionales por la New York University, se vinculó al grupo Telefónica en marzo de 1999, reemplazando en la presidencia de Telefónica CTC Chile a Claudio García Swears.

Actualmente, Telefónica CTC Chile tiene 6,5 clientes, entre abonados a teléfonos móviles y fijos, frente a los 900.000 que existían a comienzos de los años noventa, y prevé alcanzar la cifra de 16 millones de líneas para el año 2010.

(EFE).- El presidente de Telefónica CTC Chile, Javier Aguirre, presentó ayer (miércoles 28) su renuncia al frente de esta filial de la multinacional Telefónica España, según informó ayer la compañía.

En una reunión del directorio celebrada este miércoles, Aguirre Nogués oficializó su renuncia “irrevocable” a la presidencia de la compañía de telefonía más importante del país y que había presentado el pasado 8 de febrero de manera informal.

La dimisión del alto ejecutivo fue aceptada unánimemente por los directores de la empresa local, quienes designaron ayer interinamente en su puesto al hasta hace poco director suplente de Telefónica CTC Chile, Antonio Viana-Baptista.

Al dejar oficialmente la dirección de la operadora de telefonía, Javier Aguirre manifestó que “es preocupante el daño que está causando la regulación del sector en la cuenta de resultados de la empresa”.

La decisión del alto ejecutivo se produce pocos días después de que la compañía hiciera público el balance del pasado ejercicio, que por segundo año consecutivo registró fuertes pérdidas operacionales.

En 2000, Telefónica CTC Chile perdió US$ 199 millones, circunstancia que “se atribuye fundamentalmente al decreto que fija las tarifas que rigen el mercado local de telecomunicaciones”.

El impacto de este decreto supuso -a juicio de Javier Aguirre- que la filial de Telefónica España registre US$ 200 millones menos de ingresos anuales, a los que suma “una pérdida de 87 millones en el negocio de telefonía móvil”.

Por eso Aguirre, quien dimitió aduciendo “razones personales”, advirtió de que es necesario modificar algunos aspectos de la regulación del mercado de telecomunicaciones, porque “si no el patrimonio Telefónica Chile seguirá siendo gravemente afectado”.

Recientemente, la compañía de telefonía presentó a la Comisión Antimonopolios una solicitud para la liberalización de tarifas, “la que, de ser aceptada, permitirá que la empresa tenga una importante recuperación de sus resultados”, precisó el directivo.

Desde 1999, Telefónica CTC Chile viene denunciando que, a consecuencia del decreto que fija las tarifas de acceso de las otras compañías a su infraestructura de telecomunicaciones local, las operaciones de la empresa en Chile se están viendo gravemente dañadas.

“Somos una de las empresas más eficientes de la industria de las telecomunicaciones, y curiosamente tenemos un volumen de pérdidas considerable que se debe principalmente a un inadecuado decreto”, declaró Javier Aguirre el pasado 6 de febrero al dar a conocer el balance anual de la compañía.

A pesar de esta situación, ayer manifestó que confía en que las instituciones y el Gobierno chileno acojan los reclamos de la empresa, lo cuales, según precisó, “son legítimos”.

La renuncia de Aguirre se hace extensiva a los cargos que ocupaba como presidente de las filiales Telefónica Perú, Telefónica Móvil, Telefónica Mundo, Telefónica Empresas, Telefónica Negocios, Telefónica Equipos, Publiguías, Istel y la gerencia de Telefónica Internacional Chile.

Javier Aguirre, licenciado en Ciencias Económicas por la Universidad Autónoma de Madrid y en Finanzas Internacionales por la New York University, se vinculó al grupo Telefónica en marzo de 1999, reemplazando en la presidencia de Telefónica CTC Chile a Claudio García Swears.

Actualmente, Telefónica CTC Chile tiene 6,5 clientes, entre abonados a teléfonos móviles y fijos, frente a los 900.000 que existían a comienzos de los años noventa, y prevé alcanzar la cifra de 16 millones de líneas para el año 2010.

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