En una carta abierta publicada ayer para marcar el 29º cumpleaños de la World Wide Web Tim Berners-Lee, fundador de Web Foundation, dice que la web ha dejado de ser “el espacio creativo, libre y abierto que fue al principio”. El gran problema, dice, es que un puñado de plataformas controla cuáles son las ideas y las opiniones que se ven. Facebook y Google fagocitan talento, acaparan datos y tienen modelos de negocios creados para maximizar ganancias y no el bien social. La solución está en un marco regulatorio que permita lograr los objetivos sociales y ayude a aflojar esas tensiones.
Algunas de sus frases:
“Los peligros que acosan a la web son reales y muchos: desde desinformación y propaganda política cuestionable hasta la pérdida de control sobre nuestros datos personales”.
“Debemos esforzarnos por cerrar la división digital que separa a quienes tienen acceso a Internet de los que no y profundiza las actuales desigualdades. Si no invertimos seriamente para cerrar esa brecha, 100.000 millones de personas no estarán conectadas hasta 2042. Eso es una generación entera que se queda atrás”.
“Lo que alguna vez fue una rica selección de blogs y sitios web ha sido comprimido bajo el peso poderosos de unas pocas plataformas dominantes. Esta concentración de poder crea un nuevo conjunto de guardianes que permiten que sean unas pocas plataformas las que controlan qué ideas y opiniones se ven y se comparten. Esas plataformas dominantes están en condiciones de asegurar su posición creando barreras a los competidores. Compran las startups que les hacen frente, compran las innovaciones y contratan el mejor talento de la industria. Ese poder concentrado en tan pocos permitió que la web se convierta en un arma de alcance mundial”.
“La economía digital de hoy necesita estándares sólidos que equilibren los interese de las empresas y de los ciudadanos online. Esto quiere decir pensar cómo se ponen en una misma línea los incentivos del sector tecnológico y los de los usuarios y la sociedad toda”.
