Daimler, dueña de Mercedes Benz, está invirtiendo US$ 1.000 millones para fabricar, por primera vez, autos eléctricos en Estados Unidos como parte de su estrategia de instalar bases de manufactura de vehí9culos de nueva tecnología en tres continentes.
La inversión está destinada a preparar la planta de manufactura en Tuscaloosa, Alabama para producir autos eléctricos. Eso significa que tendrá bases de producción de vehículos y baterías en Europa, China y Estados Unidos.
La planta de Estados Unidos va a fabricar vehículos deportivo/utilitarios para la marca EQ de la compañía, una línea totalmente eléctrica que va a competir con rivales nuevos como Tesla y viejos enemigos, como BMW y Audi, que también preparan planes ambiciosos hacia vehículos a batería.
El primer SUV eléctrico se comenzará a fabricar al principio de la próxima década y para el 2022 la marca promete que” la cartera completa” de Mercedes incluirá por lo menos un modelo eléctrico.
Markus Schäfer, jefe de producción de Mercedes, dijo que los tres lugares significan que la compañía está “lista para la era de vehículos eléctricos”.