En realidad la medicina personalizada , (o PMx, según sus siglas en inglés) desde que Genentech lanzó Herceptin, una droga para pacientes con cáncer de mama que tienen una determinada mutación genética. En aquel momento, el Herceptin parecía anunciar una revolución en la forma de desarrollar drogas y curar pacientes. Se hablaba entonces de una nueva versión de cuidados médicos, adaptados a un perfil bioquímico específico que mejoraría notablemente las tasas de eficacia y reduciría los costos del sistema y las complicaciones relacionadas con medicaciones únicas para todo el mundo. Para los fabricantes de medicamentos, este método tenía la posibilidad de mejorar ventas y ganancias mediante un nuevo modelo de negocios, productos diferenciados para poblaciones segmentadas.
Pero con excepción de algunos casos, hubo muy pocas historias de éxito, , dicen Avi Kulkarni Nelia Padilla en un análisis publicado en Strategy+Business. Esto ocurre por varias razones:
Primero, las aseguradoras de salud siguen sin convencerse de los méritos de la medicina personalizada. A pesar de que son las principales beneficiarias de un sistema de salud más eficientes, parecen creer que los beneficios económicos de PMx son relativamente pequeños.
Luego, muchos laboratorios farmacéuticos no se decidieron a hacer las inversiones necesarias en medicinas personalizada. Los enormes costos les parecen desproporcionados frente a mercados pequeños para cada droga.
Además, las tecnologías requeridas para apoyar PMx – o sea, para identificar y cuantificar todos los marcadores moleculares y mutaciones en el cuerpo están conectadas a enfermedades específicas – todavía están en pañales. El costo de secuenciar el genoma humano bajó, peo el análisis necesario para interpretar los datos sigue siendo alto. Y hasta los más fervientes defensores se ven obligados a admitir que el próximo paso está muy lejos todavía de lograrse. Pero el motivo más decisivo por el cual no hay muchas historias de éxito es la notable renuencia entre los médicos a adoptar PMx. La medicina ers una disciplina cautelosa, se entiende, y en algunos casos , PMx exige a los profesionales que hagan diagnósticos y tratamientos sobre la base de complejos cambios moleculares.
Hacer realidad la promesa
A pesar de estos problemas, el uso generalizado de PMx en la clínica no es tan hipotético como parece. Mientras los investigadores, médicos, reguladores, aseguradoras y laboratorios farmacéuticos discuten entre ellos, aparecen tres soluciones con la posibilidad de ayudar a clarificar el problema.
- Se facilitarían los estándares regulatorios. La FDA podría reducir los obstáculos para el desarrollo de medicinas personalizadas. Algunos expertos han propuesto un sistema de aprobaciones en el cual las drogas y los diagnósticos podrían salir al mercado bajo aprobaciones provisionales usando regulaciones existentes para pruebas diagnósticas. Este sistema permitiría a los desarrolladores de drogas llegar rápido al mercado para testear sus productos en el mundo real.
- Reequipar las capacidades de los laboratorios para el largo término. Muchas empresas farmacéuticas no advierten cuánta superposición hay entre las capacidades requeridas para el éxito de PMx y sus capacidades existentes en el desarrollo y comercialización de drogas.
- Expandir las aplicaciones de PMx para incluir dispositivos centrados en el paciente. Cada vez más la medicina personalizada implica tener equipamiento centrado en el paciente como escáners y dispositivos biométricos. Esta expansión podría ser la solución que ejerza la mayor influencia en llevar la medicina hacia el futuro.
La migración de empresas de tecnología hacia el terreno de la salud es un paso intermedio necesario para que PMx se ubique en el centro y se convierta en una función orientada al consumidor.