Suele afirmarse que los avances en tecnología aumentan la seguridad de los aviones, pero el mayor peligro para los pasajeros son los pilotos que dejan que gran parte del vuelo sea realizado por máquinas. Esto lo revela el Wall Street Journal, que tuvo acceso a un informa preliminar comisionado por la FAA. Entre otras cosas el borrador dice que “a veces los pilotos confían demasiado en sistemas automatizados y podrían ser renuentes a intervenir”.
El estudio agrega que algunos pilotos “carecen del conocimiento y habilidades necesario para controlar adecuadamente la trayectoria de su avión debido a métodos inadecuados de capacitación. No es la primera vez que la dependencia de los sistemas automatizados se cita como un problema de importancia.
El estudio descubrió que alrededor de dos tercios de los pilotos tenían dificultad para manejar manualmente los aviones o cometieron errores al usar las computadoras de la aeronave.
En 2011, otra investigación que examinó datos de 46 accidentes y 9.000 vuelos descubrió que en más de 60% de los accidentes los pilotos tuvieron problemas al manejar manualmente el avión o se equivocaron con los controles automáticos de vuelo. Un error típico fue no reconocer que el piloto automático o el regulador automático, que controla el combustible que va a los motores, se habían desconectado. Otros no supieron tomar las medidas necesarias para recuperarse de un ahogo en el vuelo o para monitorear y mantener la velocidad en el aire.
Se cree que la principal causa de muchos de los accidentes aéreos en los últimos años es escaso conocimiento de las situaciones e incapacidad para usar sistemas automatizados..
Por ejemplo, hace cuatro años cerca de Buffalo, Nueva York, el copiloto de una aerolínea regional programó información incorrecta en las computadoras del avión, lo que hizo que la nave redujera la velocidad a un nivel peligroso. Eso generó un aviso de motor detenido. El capitán, que no había advertido que el avión había reducido tanto la velocidad, reaccionó llevando repetidamente los controles hacia atrás cuando el procedimiento correcto era empujarlos hacia adelante.
El avión cayó matando a las 49 personas a bordo y una en tierra.
El problema se combina con la fatiga de los pilotos. Según la Asociación Británica de Pilotos aéreos (Balpa), en mayo 2010, se invocó cansancio cuando cayó un avión de Air India al acercarse al aeropuerto de Mangalore, con un saldo de 158 muertos. Por increíble que parezca, el capitán, Zlatko Glusica, había dormido durante la mitad del vuelo desde Dubai y se despertó desorientado cuando era el momento de aterrizar.
Cuando se analizó la caja negra con la grabación del vuelo, se descubrió que contenía 110 minutos de silencio, interrumpidos sólo por el sonido de ronquidos y respiración profunda. Bill Voss, presidente de la U.S. Flight Safety Foundation, cree que la capacidad de los pilotos para responder a la caída de los sistemas automatizados, o a su mal funcionamiento, “es el gran problema que ya no podemos ignorar. Hemos sido muy lentos en reconocer las consecuencias”.
Condensación de una nota publicada en el Daily Mail e Londres.