<p>Se necesitan pilas (baterías) de mejor calidad y, sobre todo, más duración. Hasta el presente el tema de las baterías no había recibido demasiada atención, pero ahora que la gente hace de todo desde dispositivos móviles no conectados al enchufe de la pared, la humilde batería cobra una importancia sin precedentes. Eso, sin embargo, tal vez podría estar a punto de cambiar. <br />
El Cleantech Group, una compañía de investigación que estudia inversiones en capital de riesgo en Norteamérica, Europa, Israel, China e India, cree que en estos tiempos recesivos, el capital para financiar el negocio de baterías de avanzada es de los únicos que está creciendo.</p>
<p>Sara Bradford, directora de la investigadora Frost & Sullivan, vaticina que Norteamérica podría estar a las puertas de un renacimiento en fabricación de pilas. Según ella, la industria está fortaleciéndose de la mano del paquete de estímulos del gobierno federal, entre otros incentivos. El movimiento hacia autos más verdes alimenta este crecimiento; vehículos híbridos y eléctricos son el gran objetivo para los fabricantes de pilas de la próxima generación.</p>
<p>Otro factor es la energía renovable. Las energías solar y eólica son fuentes “intermitentes”, sólo colectan energía durante ratos soleados o ventosos del día, no necesariamente cuando la gente lo necesita más. Para continuar sirviendo a las comunidades aun en momentos débiles, algunos en la industria energética reclaman baterías especiales que almacenen la energía verde y la despachen a pedido.</p>
<p>Una serie de tecnologías innovadoras han recibido financiamiento en lo que va de este año, pero no el tipo de dinero que recibieron las baterías de litio-ion. Es el tipo que alimenta la mayoría de los productos electrónicos portátiles, especialmente laptop y celulares. La combinación de los químicos litio e ion es la favorita para esos menesteres porque ambos guardan la mayor cantidad de energía por su tamaño y peso.</p>
<p>Si bien la mayoría de los vehículos híbridos usan actualmente baterías de níquel, que pueden guardar hasta 36 vatios-hora por libra, no logran la autonomía que los fabricantes necesitan para sus vehículos eléctricos e híbridos.</p>
<p>Startups como Valence Technology of Austin, Texas; International Battery of Allentown, Pa.; y E-One Moli Energy of Taiwan están investigando baterías que usan fosfato. Los materiales basados en manganeso también son prometedores, así como los materiales anódicos (en oposición a los catódicos). La startup británica Nexeon Ltd., que reunió unos US$ 13 millones en capital e riesgo en febrero, está desarrollando un ánodo con base de silicio.</p>
<p>Mientras tanto, la Boston-Power de Massachusetts., toma un camino diferente. En lugar de usar un material nuevo, la compañía – que reunió US$ 55 millones en enero y le provee de baterías a Hewlett-Packard para sus laptop – dice que ha mejorado la batería de litio-ion con una fórmula química única y con un diseño eléctrico y mecánico que aumenta la densidad y confiabilidad de la energía. La compañía dice que sus baterías no se degradan hasta el tercer año (la mayoría de las baterías de laptop comienzan a decaer después del tercer mes) y puede recargar 80’% en 30 minutos.</p>
<p> </p>
La carrera por mejorar las baterías
Con la proliferación de productos electrónicos móviles se ha generado una carrera por mejorar rendimiento y duración de las pilas que los alimentan. A tal punto que muchos dicen que el sector podría convertirse en motor de la recuperación económica.