La decisión obedece al temor de que su software de antivirus pueda ser utilizado por el Kremlin como herramienta para recoger datos de inteligencia. Lo hace para calmar las preocupaciones de los gobiernos occientales que temen que Rusia aproveche el antivirus para espiar a los clientes.
Una parte de las nuevas instalaciones estará en Zurich. La empres dijo que eligió Suiza por sus leyes de protección de datos y por su política de neutralidad.
El año pasado Estados Unidos ordenó a los organismos de estado que eliminaran el software Karspersky de sus redes. La compañía rusa negó categóricamente la acusación y presentó una demanda contra la prohibición norteamericana.