Frustran en Italia un ataque informático al sistema bancario
La policía judicial (guardia di finanza) detuvo a miembros de una banda hackers cuya base funciona en Transdñestria, con capítulos romano y milanés. Su objeto era lanzarse el próximo fin de semana sobre Banca Intesa y otras entidades.
La idea era aprovechar el “ferragosto”, cuando clientes, empleados y ejecutivos están de vacaciones. Pero, alertada desde un país de Europa oriental –Rumania, tal vez-, la policía judicial avisó a Intesa y, juntos, lanzaron una serie de veloces operaciones durante el fin de semana pasado. Todas centradas en lo que se conoce como banca personal o familiar.
Entre los detenidos figuran dos piratas veteranos. Uno de ellos, catalogado como ladrón informático en los Balcanes, actuaba desde Milán; el otro, desde Roma. El primero manejaba una bandita de emigrados, entre ellos búlgaros, moldavos y serbios, y se dedicaba a violar códigos de acceso. El segundo, un vasco, ya había intervenido en maniobras de “phishing” contra los correos italiano, austríaco y esloveno.
Hasta la noche del martes, los arrestado eran 35 entre italianos y extranjeros. Al momento de ser frustrado, el operativo estaba a punto de substraer alrededor de € 500.000. Pero su objetivo final decuplicaba ese monto y no se limitaba a Intesa.
Según medios suizos y alemanes, la matriz de estos delitos está en Tíraspol, capital de un estado pirata –sólo Rusia lo reconoce-, que ocupa una delgada línea sobre el río Dñestr. Vale decir, está entre Ucrania y Moldavia, pero sus habitantes son mayoritariamente rusos. En el curso de diez años, Transdñestria se ha convertido en centro para todo tipo de actividades grises y negras.
Desde tráfico ilegal de armas –nucleares inclusive-, psicofármacos y drogas hasta ataques informáticos. Verbigracia, el frustrado en Italia o el emprendido, entre abril y junio, por cuenta de la inteligencia rusa, contra los sitios públicos de Estonia. En ese caso, se trataba de una original venganza política. En Europa occidental sospechan que los costosos pero eficaces servicios del país pirata tienen clientes en agencias de inteligencia como MI5, MI6, CIA o sus pares rusa, ucraniana, polaca, turca, egipcia, etc.
La idea era aprovechar el “ferragosto”, cuando clientes, empleados y ejecutivos están de vacaciones. Pero, alertada desde un país de Europa oriental –Rumania, tal vez-, la policía judicial avisó a Intesa y, juntos, lanzaron una serie de veloces operaciones durante el fin de semana pasado. Todas centradas en lo que se conoce como banca personal o familiar.
Entre los detenidos figuran dos piratas veteranos. Uno de ellos, catalogado como ladrón informático en los Balcanes, actuaba desde Milán; el otro, desde Roma. El primero manejaba una bandita de emigrados, entre ellos búlgaros, moldavos y serbios, y se dedicaba a violar códigos de acceso. El segundo, un vasco, ya había intervenido en maniobras de “phishing” contra los correos italiano, austríaco y esloveno.
Hasta la noche del martes, los arrestado eran 35 entre italianos y extranjeros. Al momento de ser frustrado, el operativo estaba a punto de substraer alrededor de € 500.000. Pero su objetivo final decuplicaba ese monto y no se limitaba a Intesa.
Según medios suizos y alemanes, la matriz de estos delitos está en Tíraspol, capital de un estado pirata –sólo Rusia lo reconoce-, que ocupa una delgada línea sobre el río Dñestr. Vale decir, está entre Ucrania y Moldavia, pero sus habitantes son mayoritariamente rusos. En el curso de diez años, Transdñestria se ha convertido en centro para todo tipo de actividades grises y negras.
Desde tráfico ilegal de armas –nucleares inclusive-, psicofármacos y drogas hasta ataques informáticos. Verbigracia, el frustrado en Italia o el emprendido, entre abril y junio, por cuenta de la inteligencia rusa, contra los sitios públicos de Estonia. En ese caso, se trataba de una original venganza política. En Europa occidental sospechan que los costosos pero eficaces servicios del país pirata tienen clientes en agencias de inteligencia como MI5, MI6, CIA o sus pares rusa, ucraniana, polaca, turca, egipcia, etc.
