Un equipo de científicos formado por investigadores del Instituto de Tecnología de Rochester y del Instituto Tecnológico de Georgia, Estados Unidos, realizaron simulaciones de la actividad eléctrica del corazón en computadoras de escritorio y en teléfonos celulares, algo que hasta ahora sólo podían realizar las súper computadoras.
Este nuevo método, que implica una gran simplificación de fórmulas, ayudará a diagnosticar afecciones cardíacas, pero mucho más importante amplía el alcance de la ciencia cardíaca porque permite simplificar la investigación.
Ahora se podrá trabajar con esos complejos modelos en tiempo real y eso abre un nuevo mundo de oportunidades.