El CES es una fiesta de aparatos de todo tipo, grandes sy pequeños: televisores, autos, pianos y hasta inodoros. Eso y muchísimo más viene con la opción de ser activados por la voz humana.
Cualquiera sea la marca del hardware, el programa virtual ligado o incorporado a él será alguna de estos dos: o Alexa de Amazon o Google Assitant.
Según Shadecraft, una compañía que fabrica sombrillas de jardín que se pueden abrir y cerrar por medio de órdenes habladas, Alexa es más sencillo. “Fue mucho más fácil integrar Alexa”, dice Armen Gharabegian. “Pero también probamos Google Assistant”. Los usuarios le pueden pedir a Alexa que se abra y se cierre automáticamente o que ponga música a través de los parlantes. Pero Shadecraft quiere integrar Alexa totalmente para que el parasol se comporte exactamente igual que el parlante inteligente Amazon Echo.
Resulta muy fácil conectar Alexa a cualquier cosa porque Amazon la ofrece en un solo chip: el Alexa Connect Kit, en venta desde hace algunos meses.
Pero esta semana en el CES Google acaba de anunciar una herramienta equivalente con un nombre muy parecido: Google Assistant Connect. Pero cualquier producto que use ese chip tendrá que conectarse inalámbricamente a un dispositivo inteligente de Google. Esto tendrá la ventaja de poder acceder a las diferentes funcionalidades que ofrecen las ayudas virtuales. Google Assistant es mejor que Alexa respondiendo preguntas sobre el mundo exterior. Alexa tiene más apps.