Nuestro país -dice- aún necesita recorrer la separación e independencia de los poderes para ser una verdadera República, no sólo formalmente sino en la práctica diaria.
En este marco, resulta indispensable también, respetar las instancias naturales de un proceso judicial, donde los fiscales acusan, los defensores alegan a favor de los acusados, y los jueces deciden en mérito a las evidencias y los argumentos.
“Por ello, desde ACDE, consideramos reprochables las amenazas, las actitudes revanchistas o las manifestaciones públicas a favor o en contra de cualquier involucrado, así como la referencia a dolorosas circunstancias de nuestra vida política que aún no han tenido un resultado judicial definitivo.”
“Estimamos que la situación en nuestro país es lo suficientemente compleja y dolorosa en lo político, lo económico y lo social, con niveles de pobreza que hieren a millones de nuestros hermanos, como para que se avance en actitudes vindicativas que afectan la paz social que nuestra población merece y demanda.”