Registro

    Con la música a todas partes

    Nueva York


    La división de música de la norteamericana Time Warner anunció su fusión con la británica EMI para crear la mayor compañía discográfica del mundo. La nueva empresa ­valorada en alrededor de US$ 20.000 millones­ controlará una cuarta parte de la industria con US$ 8.300 millones en ventas. La flamante Warner EMI Music estará presente en 70 países y representará a unos 2.500 músicos. El grupo EMI maneja los sellos Virgin, EMI, Capitol Records, Astral, Priority y Blue Note.


    Otro gigante en carrera

    Nueva York


    Los laboratorios norteamericanos Pfizer y Warner-Lambert concretarían finalmente su fusión por US$ 84.000 millones, para crear el segundo grupo farmacéutico del mundo. Luego de tres meses de arduas negociaciones, American Home Products, que tenía un acuerdo previo de fusión con Warner-Lambert, accedió a renunciar a él a cambio de una compensación de US$ 1.800 millones.


    No todo va mejor

    Atlanta


    Coca-Cola decidió reducir 20% de su plantel mundial como parte de un plan de reestructuración diseñado para revertir los US$ 45 millones en pérdidas del cuarto trimestre de 1999. Douglas Daft, el nuevo presidente de la compañía, anunció que la mayor empresa de bebidas eliminará 6.000 puestos de trabajo: 2.500 de su sede de Atlanta, Estados Unidos, 800 de otras ciudades norteamericanas y 2.700 de sus filiales del resto del mundo.


    Conflicto con espuma

    San Pablo


    Aunque el gobierno brasileño aprobó la fusión de las cerveceras Brahma y Antarctica, ambas compañías dijeron que no están dispuestas a aceptar varias de las condiciones impuestas por la Secretaría de Derecho Económico del Ministerio de Justicia. Las cerveceras se niegan a vender alguna de las tres principales marcas ­Brahma, Antarctica o Skol­ para poder llevar a cabo la unión de sus negocios. Según un comunicado de sus directivos, esta operación perjudicaría los proyectos internacionales de la nueva compañía y la dejaría en una posición de desventaja en el mercado brasileño.


    Nuevo récord en fusiones

    Londres


    El holding británico de telecomunicaciones Vodafone AirTouch acordó su fusión con el grupo alemán Mannesmann. La transacción, valuada en US$ 190.500 millones superará en casi US$ 30.000 millones a la reciente unión entre AOL y Time Warner. La nueva compañía se convertirá en el mayor grupo de telefonía móvil de Europa, con una participación global de 10% y un valor de mercado cercano a los US$ 320.000.


    El grupo del Reino Unido controlará 50,5% de la empresa combinada. La compañía alemana posee ­además de sus divisiones de telefonía fija y móvil­ operaciones en el negocio de ingeniería, automación y tubos. Vodafone había anunciado, pocos días antes del acuerdo, la creación del mayor portal europeo de Internet en sociedad con el grupo francés de servicios y telecomunicaciones Vivendi.


    El cruce de los Pirineos

    Madrid


    El español Banco Santander Central Hispano (BSCH) será el principal accionista extranjero del francés Société Genérale (SG). A través de un intercambio de acciones, el BSCH llevaría a 7% su participación de 5,04% en el banco francés, mientras que SG se quedaría con 3% del paquete accionario del español. El pacto incluye acuerdos de cooperación en cinco áreas: gestión de activos, servicios financieros especializados, banca de inversión, mayorista, minorista y electrónica.


    Franceses globales

    París


    France Telecom llegó a un acuerdo con sus socios Sprint y Deutsche Telecom para quedarse con la totalidad del paquete accionario de Global One. La operadora francesa de telecomunicaciones pagará US$ 3.882 millones para adquirir 71% y tomar el control total de la compañía, que provee servicios internacionales de voz y datos a grandes empresas en 65 países. El futuro de Global One se había puesto en duda ante la reiterada disputa de sus socios.


    Expansión farmacéutica

    Basilea


    La farmacéutica suiza Clariant adquirirá a su competidor británico BTP en US$ 1.700 millones y se convertirá en un líder de la industria química farmacéutica y agroquímica. La operación se realizará a través de una oferta pública y se estima que la prima alcanzará 72,7%. La transacción apunta a duplicar la presencia de la compañía en el sector de productos intermedios destinados a las ciencias de la vida.


    Más voces en el teléfono

    Roma


    Telecom Italia y las españolas Endesa y Unión Fenosa crearán un holding de Internet y telecomunicaciones valorado en US$ 12.100 millones. El grupo, compuesto por la telefónica italiana, la empresa eléctrica líder de España y la tercera compañía de servicios de ese país, competirá directamente con Telefónica de España. El objetivo es controlar 14% del mercado español de telefonía fija a través de Retevisión ­donde ya son socias­ y ganar posiciones en el negocio de los celulares e Internet con Amena y Alehop.

    Contra la e-conomía


    Varios libros
    de reciente publicación revelan que la e-conomía (como
    bautizó el británico Financial Times al nuevo orden
    económico gestado por la Internet) se ha convertido, súbitamente,
    en el blanco de comentarios mordaces y pronósticos sombríos
    por parte de académicos, periodistas y analistas financieros.

    Uno de
    los ataques más sorprendentes, por su origen, es el que acaba de
    lanzar Tony Perkins, fundador y socio de Red Herring, una firma de California
    especializada, justamente, en asesorar a inversionistas en el negocio
    de las nuevas tecnologías.

    Se supone,
    por lo tanto, que Perkins sabe de qué habla cuando plantea en su
    libro The Internet Bubble que “el valor de mercado de US$ 400.000
    millones que suman las empresas de Internet en Estados Unidos está
    groseramente inflado por un exceso de especulación e ingenuidad”.

    Según
    Perkins, las empresas estadounidenses de e-commerce están
    sobrevaluadas en unos US$ 36.000 millones. Y tendrían que exhibir
    un crecimiento promedio anual de 87% en sus ventas durante el próximo
    quinquenio para justificar sus actuales cotizaciones bursátiles.
    (Una proeza que, se apresura a aclarar el autor, no lograron ni Microsoft
    ni Dell en su breve y rutilante historia).

    Eamonn
    Fingleton cuestiona a la e-conomía desde otro flanco en
    su obra In Praise of Hard Industries. No son los gigantes de la
    Web los que en mayor medida contribuyen a crear riqueza en un país,
    argumenta Fingleton, quien muestra como ejemplo el caso de Suiza, una
    economía exportadora mucho más exitosa que la estadounidense,
    a pesar de que sus empresas casi no han incursionado en el negocio de
    Internet.

    Después
    de refutar la difundida idea de que un aluvión de información
    de fácil y rápido acceso conduce, necesariamente, al progreso
    del conocimiento humano, Fingleton advierte sobre lo que, a su juicio,
    asoma como la mayor amenaza de la era Internet: un mundo en creciente
    desequilibrio, con abundancia de empleos y bienestar para las personas
    inteligentes y educadas, pero sin oportunidades ni futuro para los menos
    afortunados.