Una grande poco conocida

    El ranking de las 1.000 empresas que más venden, publicado por MERCADO en su edición de junio, reveló el notable avance de Petrolera San Jorge con respecto a la medición del año anterior: pasó del puesto 798º al 221º, con un nivel de facturación que entre el ejercicio cerrado en junio de 1992 y el

    de 1993 trepó de $ 10,8 a $ 69,2 millones.

    La plataforma de este salto debe buscarse en el comienzo de la explotación del yacimiento El Trapial, ubicado en el área Huantraico, cuyo permiso de exploración obtuvo en 1988 dentro del llamado plan Houston, implementado durante la presidencia de Raúl Alfonsin.

    El área tiene una extensión de 4.800 kilómetros cuadrados y su explotación involucra un compromiso inicial de inversión de US$ 40 millones. Esta era considerada un área de alto riesgo porque anteriormente YPF había realizado 18 pozos que resultaron estériles.

    Teniendo en cuenta estos antecedentes, la empresa encaró la explotación contratando personal altamente capacitado al que dotó de los últimos adelantos técnicos. Esta política se tradujo en el descubrimiento, durante 1989, del yacimiento Curamched, de una extensión de 52 kilómetros cuadrados, que todavía se encuentra en la etapa de evaluación. Pero, actualmente, los esfuerzos de la compañía se concentran en el yacimiento El Trapial, descubierto en 1991, con reservas probadas y probables por 200 millones de barriles (32 millones de metros cúbicos) que lo ubican entre los mejores del país, después de Puesto Hernández, explotado por Pérez Companc, y Chihuido,

    explotado por YPF y que se encuentra al norte de El Trapial.

    El vicepresidente de la compañía, Jorge Priu, señala, por otra parte, que Puesto Hernández es un yacimiento que comenzó su etapa de declinación, en tanto que El Trapial está en su plenitud operativa.

    El Trapial tiene una extensión de 61 kilómetros cuadrados, lo que da una idea de la enorme potencialidad del área Huantraico a medida que se profundicen las tareas de exploración y se avance más en la evaluación del yacimiento.

    Hasta este descubrimiento, las actividades de Petrolera San Jorge se limitaban a la exploración de diversas áreas y a la explotación del viejo yacimiento Tupungato, en la provincia de Mendoza, cuya producción actual (250 metros cúbicos diarios) viene reflejando un período de declinación.

    Petrolera San Jorge es una de las empresas privadas más antiguas del sector. Se creó en 1962 y fue un desprendimiento del grupo Bolland, al que actualmente sigue vinculada.

    El yacimiento El Trapial entró en actividad en 1992 y a partir de noviembre de ese año Petrolera San Jorge comenzó a entregar 1.700 metros cúbicos diarios a YPF, a través del Oleoducto del Valle (Oldelval). En diciembre (un mes después) ya llegaba al doble, y en ese nivel se mantuvo, con escasas variantes, hasta hace algunas semanas, debido a las limitaciones de transporte del oleoducto.

    El gran envión se produjo en mayo, cuando comenzó a operar a pleno el oleoducto a Chile, por el cual inyecta diariamente 3.000 metros cúbicos, que a partir de estos días se elevarán a 4.000, es decir que desde julio sus ventas totales subirán a 7.500 metros cúbicos diarios, lo que le permitirá ubicarse

    entre las tres principales empresas productoras del país, después de YPF y de Pérez Companc.

    Este nuevo nivel de ventas refleja con bastante aproximación la capacidad máxima de producción de la actual estructura, aunque es preciso tener en cuenta que el nuevo volumen de ventas mensual (de $ 22 a 24 millones) no incluye las posibilidades que surgen de los otros yacimientos que tiene en

    exploración, tanto dentro del área Huantraico, como en las que figura como operadora en asociación con otras empresas. Dentro del área neuquina, Petrolera San Jorge es la mayor operadora después de YPF. Además de Huantraico opera otras siete áreas, que en total representan 28.631 kilómetros

    cuadrados, entre las que se destacan por su extensión Las Lajas (5.704), China Muerta (3.546), Zapala (2.589) y Río Negro Norte (2.274).

    Para el área Huantraico se asoció con la Corporación Financiera Internacional, dependiente del Banco Mundial, que adquirió 15% del capital.

    NOTABLE CRECIMIENTO DE LAS VENTAS.

    Si se cumplen los pronósticos de ventas de Priu, los totales del ejercicio recién iniciado se situarán entre $ 260 y 270 millones. En sólo dos años, entonces, la compañía habrá llegado casi a cuadruplicar su facturación.

    Las inversiones realizadas en infraestructura, que rondaron $ 30 millones de pesos anuales en exploración y otra cantidad similar en explotación, le permitieron estructurar una red de oleoductos internos para dar salida a una producción de 10.000 metros cúbicos diarios. Es decir que, en este aspecto, aun con el importante aumento de la producción registrado en estas semanas, todavía dispondría de una capacidad adicional de transporte de 2.500 metros cúbicos diarios, que no puede movilizar debido a que tanto el nuevo oleoducto a Chile como el Oldelval tienen colmada su capacidad de transporte.

    Sin embargo, durante este año su producción total de petróleo puede acercarse a 2.050.000 metros cúbicos, que elevarían el total desde su fundación en 1962 a 3.250.000, equivalentes al consumo total del país durante un mes.

    Priu anticipó a MERCADO que la empresa financiará totalmente su evolución con recursos propios y préstamos a largo plazo, de modo que, por lo menos en el corto plazo, no tiene previsto recurrir al mercado bursátil para incorporar nuevos capitales.