ESTRATEGIA | Portada
Por Tomás Wells (*)

Partamos de que la evolución de Internet no es escalonada sino lineal, constante. Todos los días cambia, crece, innova y se transforma. Entonces podemos decir que la palabra 3.0 (ligada a todas sus combinaciones) solamente nos sirve para agrupar ciertos cambios, tendencias y tecnologías con el único fin de entenderlas.
Ahora bien, ¿sirve? Desde mi punto de vista, sí. Como profesionales de la comunicación no solamente debemos entender y estar actualizados en todo momento respecto de los cambios y rumbos de la red, sino que también debemos transmitir este conocimiento a nuestros clientes. Y estos “agrupamientos” nos ayudan a hacerlo.
Respecto de qué representa esta palabra, la realidad es que por más que ya tiene poco más de dos años aún no existe un consenso. Sin entrar en detalles ni tecnicismos, podemos decir que si la Web 2.0 se caracteriza por el auge de las redes sociales, la próxima Web 3.0 lo hará alcanzando una Internet inteligente y presente en cualquier lugar, que conozca y se adapte a sus usuarios.
Versión 3.0
El término 3.0 comprende muchas características y demasiadas versiones. Generalizando y haciendo foco en las principales, podemos decir que son las siguientes:
• Inteligencia artificial: extraer el significado real de cómo las personas interactúan con la Web, entenderlas.
• Personalización: contextualizar la Web en base a lo que la persona utiliza.
• Movilidad: poder acceder a todo, en cualquier lugar y en todo momento.
• Web semántica: estandarizar el lenguaje interno de la Web para que el sistema pueda categorizar, relacionar y ordenar más fácilmente la información.
Volcando estas herramientas a usos actuales y sólo para comprender el cambio que generan podemos decir que, por ejemplo, los blogs pasarán a ser “lifestreams” (mostrando no sólo lo que escribís sino lo que leés, escuchás, votás, etc.); la publicidad Rich Media mutará hacia algún tipo de advertainment; el modelo orientado a comunidades pasará a estar orientado en la unidad (la Web personal); lo mismo que veamos en el monitor de la computadora lo podremos ver desde un celular o dispositivo móvil o consolas de videojuegos, etc.
La realidad es que, tal como mencioné anteriormente, la evolución no es escalonada, y podemos encontrar actualmente en la red algunas aplicaciones o sitios que concuerdan con las características de la Web 3.0. Sólo para citar algunos ejemplos, podemos nombrar a Netvibes, iGoogle, o la reciente y local Popego.
Personalización
Ahora bien, saliéndonos un poco del mundo digital y sumergiéndonos en el mundo de la publicidad y el marketing podemos hacer un paralelismo y decir que la Web 3.0 es algo así como la inclusión de la inteligencia del viejo CRM a los nuevos medios y tecnologías, con la finalidad de convertir la sobre-información en customización de la comunicación hacia el usuario, aprovechando la convergencia de los medios para establecer contacto directo en cualquier momento y lugar (o mejor dicho, en el mejor de ellos).
¿Hacia dónde va la publicidad? Seguramente, el tiempo hará que cada vez nos sorprendamos menos al ver esa escena de la película de Steven Spielberg Minority Report en donde los carteles de vía pública “venden” de forma personalizada y única al transeúnte. Así como tampoco nos sorprenderemos al ver tal vez un televisor que ya no tenga canales sino tags. ¿Quién sabe?, los tiempos corren y cada vez hay menos límites, dejemos volar la imaginación.
(*) Tomás Wells es director y fundador de Woonkie.
|
Wikidefinición de rich media Sinónimo de multimedia: es la combinación entre imagen, texto y sonido. Tiene como objetivo combinar estos elementos para que el hombre y la sociedad interactúen con la computadora. Aplicado a la publicidad online, se refiere al uso de formatos multimedia en banners, links y textos. |

