Durante los últimos meses, los buscadores de signos de reactivación económica, esos optimistas incansables, recibieron un buen indicio: la empresa Kraft, la segunda manufacturera de alimentos del mundo, repatrió la producción de los productos Royal a la Argentina, de donde la había retirado en 1999 para marchar a Brasil, al advertir la crisis que se avecinaba. Actualmente, la compañía tiene tres establecimientos industriales en el país (dos en la provincia de Buenos Aires, en Pacheco el antiguo Establecimiento Modelo Terrabusi y Tres Arroyos (ex Vizzolini); y otro en Villa Mercedes, San Luis).
La elaboración de los productos Royal se puso en marcha en la planta puntana, donde también se producen varias marcas de jugos en polvo. Desde allí, Kraft dará comienzo a un plan de exportación de postres Royal al resto del Cono Sur. La línea Royal incluye más de 45 presentaciones de flanes, postres, gelatinas y mousse. “El hecho de que estemos nuevamente encarando la elaboración de estos productos de manera local constituye una clara señal del compromiso que mantenemos con nuestro país”, afirma Alberto Pizzi, gerente general de la unidad Alimentos y Bebidas de Kraft Foods Argentina.
La compañía es la mayor empresa de alimentos y bebidas de Estados Unidos y la segunda a escala mundial. Tiene plantas industriales en 66 países y sus productos están presentes en casi todo el mundo. Entre las marcas líderes que la empresa comercializa en la Argentina se destacan las galletitas Terrabusi (Express, Cerealitas, Mayco); las pastas Don Felipe, Vizzolini y Canale; los jugos en polvo Tang, Clight y Verao; las golosinas Milka, Suchard, Rhodesia, Tita y Shot; y, desde luego, los productos Royal. Sólo en la Argentina, Kraft emplea a más de 3.500 trabajadores.
Si bien la compañía no fue inmune a los efectos de la crisis, logró superarla sin reducciones de personal, ni caídas en la calidad o cantidad de sus productos. Por el contrario, nuevas marcas fueron lanzadas al mercado. “Nos manejamos en distintos escenarios y adaptamos nuestro management a cada caso. En Brasil, México y Rusia ya hemos pasado por procesos similares de crisis y devaluación, y en todos los casos hemos sabido encontrar la fórmula para seguir creciendo en el mercado”, explica Michelle Saporiti, directora de Asuntos Corporativos para el Cono Sur.
En los últimos meses, la compañía ha lanzado una gran cantidad de marcas, muchas de ellas con llamativo éxito. Sólo en este año, presentó las galletas dulces rellenas Trakinas, la línea de galletas Delicias Artesanales Terrabusi, las crackers saladas Club Social, los alfajores Manon y Triple Pepitos, entre otros.
La apuesta de la empresa se debe a la firme creencia en que el país
superará su situación actual. “Kraft cree en la Argentina más
allá de la difícil situación económica actual”,
define Saporiti. Y respalda lo expuesto enumerando las inversiones de la firma
en el país. Por caso, la Planta Pacheco es una de las cinco mayores industrias
de producción de galletitas del mundo, donde además la empresa
acaba de inaugurar sus nuevas oficinas administrativas y de ventas en un edificio
inteligente dentro del parque industrial. “Como reconocido líder en el
segmento de consumo masivo alimenticio, la empresa planifica su desarrollo e
inversiones a largo plazo. Y es por esa razón que estamos siempre muy
atentos a los nuevos desarrollos de negocios con los que podamos crear importantes
sinergias, siempre con el objetivo de llegar a nuestros consumidores con productos
de altísima calidad y a buen precio”, remata el ejecutivo.