Pablo Swiecicki
Esta concepción de la arquitectura tuvo algunos hitos claves que sirvieron para lograr una diferenciación y valor agregado en los 30 años de historia del estudio.
Un hecho trascendental que destaca el directivo, fue certificar la norma ISO 9001-2008. Con el mismo criterio de brindar productos controlados y revisados bajo estándares de calidad, en 2011 sumaron la certificación de “Requisitos de desempeño para Estudios de Arquitectura IRAM-CPAU”. Y hace dos años migraron la modalidad de trabajo a la tecnología BIM (Building Information Modeling).
“La certificación LEED para la construcción sustentable, como la certificación ISO, IRA-CPAU y la tecnología BIM forman parte de un todo, de una misma filosofía de trabajo y forma de concebir la arquitectura”, explicó el arquitecto Pablo Swiecicki, director del estudio.
–¿Qué es el urbanismo sustentable?
–Sustentable tiene que ver con lo verdadero, con aquello que puede sostenerse por los propios valores. Este concepto lo aplicamos no sólo a la arquitectura, sino también a la gestión que ESARQ desarrolla como empresa del sector.
Todas las obras del estudio son sustentables; ya no concebimos otra manera de diseñar y construir un edificio. Esto es trabajar contemplando buenas prácticas y aplicando el sentido común, que nos lleva nuevamente a la idea de respetar el medio ambiente, el entorno del cual formamos parte.
–¿Cuándo un edificio es sustentable?
–Cuando el diseño, construcción y operación reducen de manera significativa, o mejor aún, elimina el impacto negativo de las edificaciones sobre el medio ambiente y sus habitantes.
–¿Qué elementos debe tener una obra para ser sustentable?
–Existen cinco áreas de lo que se considera diseño/construcción sustentable que son: optimización de recursos y materiales; reducción del consumo de energía y en su lugar el uso de energías renovables; disminución de los residuos y las emisiones de CO2; disminución de los costos de operación y mantenimiento de edificios; y mejora de la calidad de vida para nosotros y las generaciones futuras.
–¿Cómo es ese proceso de certificación en la Argentina?
–Hay que contar con especialistas formados en LEED que guíen todos los procesos, que abarcan no solo la tarea de proyecto y dirección de obra sino también las condiciones de operación futura del edificio.
–¿Cuáles son las ventajas de esta norma?
–Son múltiples ya que reducen los costos operativos; realzan el valor de la propiedad y aumentan las ganancias; reducen los riesgos de responsabilidades; optimizan el desempeño económico en cuanto al ciclo de vida del edificio; y mejoran la productividad y el bienestar de quienes allí trabajan.
–¿Y los beneficios de las construcciones sustentables?
–Los agruparía en ambientales (reducción del impacto ambiental); económicos (mejor balance económico); y de salud y seguridad (mayor confort para el ocupante).
Un edificio diseñado y construido bajo parámetros LEED reduce en promedio 70% sus residuos sólidos; 40% el uso del agua; 35% las emisiones de dióxido de carbono y entre 25% y 50% el uso de energía con respecto a las edificaciones convencionales. No es poco teniendo en cuenta que, a escala mundial, los edificios representan 17% del uso del agua; 25% del uso de madera; 33% de las emisiones de CO2; y 40% del uso de energía y materiales.
Por otro lado, son rentables teniendo en cuenta el período de vida útil de una obra, ya que el sobrecosto inicial de 4% queda amortizado entre cuatro y siete años, según el valor de la energía en cada sitio.
–¿Cuáles son las obras más emblemáticas en este aspecto que desarrolló el estudio?
–Hoy somos líder en arquitectura corporativa sustentable, con seis obras LEED certificadas y 12 en distintas fases de construcción en todo el país, que suman 125.000 m2. Entre las emblemáticas, tenemos obras corporativas de 27.000 m2 desarrolladas en Parque Patricios, para grandes clientes.