Son quienes, además, deben afrontar los desafíos crecientes impuestos por sociedades y Gobiernos que exigen a las compañías un comportamiento ético, transparente de mínimo impacto negativo en el medio ambiente. Además, deben lograr demostrarlo de manera clara y sencilla.
Grandes avances se han detectado en los últimos tiempos en materia de reportes de sustentabilidad. Se evidencia el camino hacia el reporte integrado –performance financiera, ambiental y social– y que sigue rigurosas metodologías de nivel internacional. Se incorpora, de manera creciente, la medición de impactos en toda la cadena valor. Y se incursiona en nuevos enfoques y presentaciones, más ágiles y dúctiles, adaptadas a los formatos digitales y en línea.
Aquí, las opiniones de destacados referentes del ámbito empresarial, representantes de los distintos sectores de la economía.

Unilever
Excelente herramienta de gestión
A escala global, la compañía comunica su desempeño de forma anual. Cuenta con dos canales para la presentación de informes sobre los compromisos establecidos en el Plan de Vida Sustentable: el Informe Anual y Cuentas y el Reporte con Avances.

Axel Flügel
“En el Informe Anual y Cuentas se incluye un resumen de nuestro desempeño respecto a sustentabilidad, y el Reporte con Avances del Plan de Vida Sustentable es el principal medio para informar nuestro desempeño respecto las metas establecidas en nuestro Plan de Vida Sustentable”, cuenta Axel Flügel, gerente de Relaciones Externas y Sustentabilidad de Unilever.
“A su vez y en forma paralela, publicamos en nuestra página web un semáforo que demuestra el avance de cada objetivo, información que se actualiza de forma constante. También, realizamos un resumen del reporte en español, donde incluimos casos locales”, explica el ejecutivo.
“Nuestro Plan se revisa de forma permanente. Cuando detectamos nuevas necesidades a ser incluidas, las tenemos en cuenta. Por ejemplo, en el año 2014, sumamos a nuestras metas un nuevo pilar de trabajo dedicado a las oportunidades para mujeres e imparcialidad en el lugar de trabajo”.
–¿Cuáles son las ventajas y las desventajas –si existieran– de realizar los reportes de RSE o sustentabilidad?
–El desarrollo de un reporte es vital para resumir y dar a conocer los avances en torno al Plan de Vida Sustentable. Es la manera de mostrar casos y resultados concretos, de forma clara y resumida hacia nuestro público de interés. Además, tomamos el reporte como herramienta de gestión interna, ya que nos permite centralizar en un documento los avances de los objetivos en cada función de la compañía. La actualización de información cada año nos permite identificar de forma periódica dónde están las oportunidades y mayores desafíos que tenemos como compañía.
–Según el Programa de Reportes 2025 del GRI “Coherencia y consistencia en la comunicación y las acciones serán los bloques más importantes de la reputación de una empresa. Hay una percepción general de que, en la era digital, cuando los informes son en ‘tiempo real’, las empresas tendrán aún menos control sobre la información acerca de su desempeño y sus efectos que en la actualidad. Esta información será mucho más accesible a todos y será recopilada y analizada utilizando potentes motores de búsqueda y software de análisis. Las empresas y los interesados podrán encontrar correlaciones y comprobar la coherencia con mayor facilidad”. ¿De qué manera afrontan las empresas estos nuevos desafíos?
–Con el avance de la tecnología y el cambio cultural de obtener información de forma instantánea, la transparencia es una variable cada vez más valorada, aunque siempre fue muy importante. El avance que propone el proyecto GRI 2025 no implica un desafío para las empresas que ya venimos haciendo negocios desde la honestidad, transparencia y coherencia, con datos provenientes de fuentes legítimas. Si bien reportamos una vez al año, actualizamos de forma constante nuestra página web con los objetivos de nuestro plan a medida que vamos avanzando en las metas propuestas.
Creo que el mayor desafío en relación al proyecto GRI 2025 va a ser adaptar y mejorar los procesos necesarios para tener información en tiempo real, lo que implica la coordinación entre funciones y, sobre todo, lograr un sistema sólido de recopilación de resultados.
–El acuerdo de París, a finales de 2015, ilusionó al mundo con la posibilidad de una lucha efectiva contra el cambio climático. El primer actor, EE.UU., ha renunciado por boca Donald Trump, a cumplir un rol protagónico. ¿Qué efectos supone que tendrá esa posición en la realidad del deterioro climático?
–Es importante enfocarnos en la necesidad de cooperación conjunta para alcanzar los objetivos. Lo central y necesario para que se cumpla con el acuerdo de París es impulsar la acción colectiva. La COP 21 junto con los ODS fueron un factor clave para concientizar de que solos no podemos y promover que todos intervengamos positivamente y seamos parte de la solución respetando y cuidando el medio ambiente.
Estamos en medio de un cambio de paradigma en cuanto la lucha contra el cambio climático y la sociedad en sí misma está siendo cada vez más consciente del riesgo que corre el planeta tierra, por lo que las empresas y Gobiernos que no sigan un modelo de gestión sustentable van a ir perdiendo adhesión por parte de sus seguidores.
Banco Galicia
Proceso de materialidad por etapas
Presenta anualmente informes de sustentabilidad desde 2005. En 2015, amplió el alcance de divulgación y publicó el primer Informe de Sustentabilidad de Grupo Financiero Galicia para dar a conocer los aspectos de la gestión sustentable de las principales empresas del grupo económico durante ese año.

Constanza Gorleri
Grupo Financiero Galicia, conformado por Banco Galicia, Tarjeta Naranja, Tarjeta Nevada, Efectivo Sí y Galicia Seguros, presentó así los resultados integrados de las distintas compañías que lo conforman.
“El desarrollo de este informe marcó el inicio de una etapa de sinergia para las compañías de Grupo Financiero Galicia que seguiremos consolidando en el reporte de la gestión de 2016”, cuenta Constanza Gorleri, gerenta de Sustentabilidad.
“Entre las ventajas de reportar, se puede mencionar el tener un documento donde se consolida la estrategia de sustentabilidad, que permite identificar oportunidades de mejora y proyectar los objetivos a largo plazo. A su vez, la elaboración del informe nos permite conocer las necesidades y expectativas de todos nuestros grupos de interés, e informarlos acerca de nuestra gestión y avances en la materia. No existen desventajas, por el contrario, es una oportunidad de demostrar crecimiento y transparencia”.
–Según el informe Reporting Matters 2015, de WBCSD, 35% de las empresas ha mejorado la publicación de su análisis de materialidad y un número creciente de empresas reporta los impactos en toda su cadena de valor. ¿Cuáles son los avances de la compañía en estos temas?
–La selección de los contenidos del informe de Grupo Financiero Galicia surgió a partir de la identificación de los aspectos comunes a la estrategia de sustentabilidad de cada una de las compañías y sus respectivos grupos de interés (empleados, clientes empresas, clientes individuos, proveedores y la comunidad, representada por organizaciones de la sociedad civil y los medios de comunicación).
Estos aspectos en común conforman los temas estratégicos que gestiona el grupo a través de sus compañías junto a sus públicos interesados.
Basados en las mejores prácticas y alineados con la metodología sugerida por la Guía GRI G4, desarrollamos el proceso de materialidad en cuatro etapas:
Identificación: la selección de aspectos relevantes fue valorada a partir de documentación específica interna y externa. Allí se incluyen planes estratégicos, memorias financieras, códigos de gobierno societario y normativas, informes de sustentabilidad de años anteriores, estrategias de sustentabilidad y encuestas a los grupos de interés. Además, consideramos la coyuntura económica, social y ambiental del país.
Priorización: a partir de la identificación de los temas relevantes para las compañías del grupo, definimos los aspectos materiales de acuerdo al análisis realizado por los referentes de las compañías y el grupo operativo de Banco Galicia.
Validación: realizamos encuestas a los principales grupos de interés para validar los temas a reportar e incorporar opiniones y expectativas que contribuyeron a fortalecer el análisis de materialidad.
Revisión: finalmente, los contenidos del informe fueron revisados internamente por el Directorio de Grupo Financiero Galicia y por los gerentes generales de las distintas compañías que lo integran, y externamente por la consulta PwC Argentina.
Una vez realizado el análisis de materialidad, identificamos el enfoque estratégico para la gestión sustentable de Grupo Financiero Galicia. A partir de ahí se identificaron los aspectos de GRI asociados y el indicador a reportar.
–Ante esta nueva realidad global, los líderes de las grandes empresas van a tener que repensar sus metas estratégicas, sus métodos con los empleados y su llegada al público; sobre todo si operan en varios países, emplean extranjeros, se expanden o pagan impuestos en muchos lugares. ¿En qué dirección es más probable que se incline ese pensamiento renovador?
–El sector privado está siendo cada vez más consciente de la incidencia de sus actividades tanto a escala local como global, y no solo en el aspecto económico sino principalmente en lo que concierne a su impacto social y ambiental. La influencia de organismos internacionales en la promoción y puesta en agenda de estos temas favorece la inclinación de las empresas hacia el desarrollo e implementación de prácticas que respondan a las expectativas y particularidades de cada uno de sus grupos de interés.
Los ODS de Naciones Unidas marcan el camino en materia de gestión sustentable a escala global para los próximos 15 años. Y desde el propio lanzamiento de estos objetivos, Naciones Unidas transmitió que no solo los países tienen que trabajar para la consecución de las metas sino que también el sector privado tiene un rol muy preponderante. Y bajo esta mirada, los ODS se han convertido tanto en una guía para los Gobiernos de países en todo el mundo como para las organizaciones de sector privado.
Los ODS presentan una oportunidad excepcional para que las empresas implementen procesos, desarrollen productos y capitalicen las oportunidades que ofrecen las nuevas tecnologías a favor de los problemas más dramáticos, grandes y urgentes que el mundo enfrenta.
Sancor Seguros
Oportunidad para la transparencia
Si bien presenta reportes desde hace 11 años, el último marcó un hito para el grupo, al incorporar la herramienta SDG Compass de Naciones Unidas, rindiendo cuenta del compromiso con los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Betina Azugna
“Por cuarto año consecutivo utilizamos la “Guía G4″ de GRI con el máximo nivel ‘de conformidad – Exhaustivo’. Por sexto año ininterrumpido adoptamos la Norma Internacional de Responsabilidad Social ISO 26000 y nuevamente alcanzamos el Nivel Avanzado de la Comunicación para el Progreso (COP) del Pacto Global de Naciones Unidas. En 2015, iniciamos el proceso de implementación de los Derechos del Niño y Principios Empresariales de Unicef, Save The Children y Pacto Global; y nos comprometimos con los Principios para el Empoderamiento de las Mujeres (ONU). Estos Reportes son externamente verificados según el estándar AA1000AS”, cuenta Betina Azugna, gerenta de RSE de la compañía.
“El reporte constituye la herramienta fundamental de rendición de cuentas y una oportunidad para demostrar la transparencia en la gestión de la empresa, con miras al largo plazo. Permite registrar, comparar y medir la evolución en el tiempo de los resultados de la gestión estratégica de la sustentabilidad. Para el grupo significa trabajar un “proceso de RSE” en forma transversal en toda la gestión del negocio, siendo no solo un instrumento de comunicación sino de gestión donde nos focalizamos en los temas materiales del negocio y en dar respuestas a nuestros grupos de interés”, enfatiza.
–Recientemente, GRI ha lanzado The Next Era of Corporate Disclosure: Digital, Responsible, Interactive. Se percibe que, pronto, aparecerán formatos nuevos para reportar. Los informes anuales actuales serán sustituidos por el intercambio de datos de sostenibilidad, centrándose en retos centrales, como el cambio climático y los derechos humanos. Además, consideran que los grupos de interés serán cada vez más relevantes en el reporting, debido a las interacciones casi a tiempo real con las empresas. ¿Se percibe esta tendencia en su organización? ¿Cuáles son los retos que debe afrontar la compañía para adaptarse a estas nuevas estrategias?
–Uno de los ejes de nuestra Estrategia de Sustentabilidad es la Sistematización y Medición del Desempeño con los estándares más evolucionados en sustentabilidad a escala mundial; por lo tanto, algunas de estas nuevas tendencias ya están siendo consideradas por nuestra empresa. En el año 2010, por ejemplo, abordamos el tema de derechos humanos como materia fundamental en nuestro proceso y hoy es un capítulo del reporte. Nuestro reto es la actualización continua con los mejores lineamientos internacionales. Somos miembros de la Comunidad Gold de GRI, de la cual participamos activamente. En 2012, integramos el Programa “G4 Pioneers”, siendo la primera empresa en América latina en reportar con ese estándar. Actualmente, formamos parte del “Programa Standars Pioneers” y nuestro 12º reporte se está realizando con esos estándares.
–Los escándalos en el ámbito empresarial se suceden en todo el mundo. Los que se acostumbran al poder pierden de vista cuando se cruza la línea ética. La identificación entre los miembros de un grupo de poder puede llevar a respaldar conductas ilegales o no éticas. ¿En su empresa, hay mecanismos para dar la alarma si se cruza esa línea ética?
–La base de nuestro comportamiento en cuanto a la relación con los distintos grupos de interés está enmarcada en un Código de Ética, que vela por la dignidad, privacidad, equidad y convivencia respetuosa; comunica los valores de la organización; establece la no discriminación en el empleo y todo tipo de relación laboral; determina el uso de los bienes y la información, las relaciones con clientes y proveedores, y la solución a los conflictos de interés. El Comité de Ética asegura y controla el cumplimiento de lo expresado en el código.
Las prácticas justas en el negocio de los seguros las abordamos trabajando en la prevención de lavado de activos y lucha contra el terrorismo; implementando procedimientos antifraude, programas de capacitación y concientización a funcionarios, empleados y cadena de valor. El Comité de Prevención de Lavado de Activos y Financiamiento del Terrorismo se encarga de velar por ese compromiso y para ello cuenta con un sistema de alertas de monitoreo de operaciones y situaciones inusuales.
Como reflexión final, creo que luego del lanzamiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas, existe un punto de inflexión. Creemos que el gran desafío, tanto de las empresas como de los demás actores, es la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible. Para las empresas implica ser creativos en la generación de valor, disminución de riesgos y sobre todo, rendición de cuentas en este sentido. Esta agenda implica tener objetivos y metas claras para rendir cuentas a escala mundial, pero lo que la diferencia es que va de lo local a lo global, por lo que cada empresa, ONG y Gobierno debería hacerla propia e integrarla a su gestión y rendir cuentas de sus resultados.
Gas Natural Fenosa
Lo que no se mide, no se gestiona
Por Bettina Llapur*

Hace 12 años que en Gas Natural Fenosa publicamos anualmente un informe de sostenibilidad en la Argentina. Nuestro primer Informe de Responsabilidad Corporativa lo elaboramos en 2004, y somos pioneros en el desarrollo de este tipo de reportes siguiendo lineamientos y mejores prácticas internacionales.
A lo largo de los años, el proceso de desarrollo de nuestro informe ha sido, y continúa siendo, una herramienta clave que nos ayuda a sistematizar y medir el desempeño económico, social y ambiental con indicadores fiables y comparables en el tiempo; evaluar donde estamos parados y detectar oportunidades de mejora; y comunicar de forma transparente y responsable nuestros compromisos a todos nuestros grupos de interés.
Para ello, hemos basado este proceso de mejora continua en estándares internacionales, incluyendo: los lineamientos de la Iniciativa de Reporte Global (GRI); el suplemento desarrollado para la industria del petróleo y gas; los criterios para cumplir con el nivel de CoP (Comunicación sobre el Progreso) avanzada del Pacto Global de Naciones Unidas; la Norma ISO26000 de Responsabilidad Social y los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Sabemos que la elaboración de estos informes requiere de un gran esfuerzo, muchos meses de trabajo y referentes de la compañía involucrados, para un documento que al poco tiempo es considerado “viejo”. Además, existe el interrogante “¿quiénes realmente se toman el tiempo para leerlos?”, por mencionar algunas de las desventajas habitualmente asociadas a los reportes.
No obstante, la clave radica en trabajar la elaboración del informe como un proceso de gestión, cada vez más sistematizado, que contribuya a retroalimentar la toma de decisiones en la empresa y responda a los requerimientos de rendición de cuentas de los diversos públicos. Lo importante es medir anualmente nuestro desempeño económico, social y ambiental, para así poder identificar oportunidades de mejora en la gestión sustentable del negocio.
Seguramente en el futuro el formato del reporte continúe cambiando, adaptándose a las necesidades y tiempos de los distintos stakeholders en la era digital. Pero el ejercicio de medir y sistematizar el desempeño continuará siendo fundamental para alimentar los procesos de mejora continua en las organizaciones, ya que como bien se dice “lo que no se mide no se puede gestionar”.
A su vez, para hacer más eficiente el proceso de reportar, involucramos a todas las áreas de la empresa a partir de la creación de un Grupo Multifunción, desarrollando un proceso transversal a toda la compañía. Estos referentes cuentan con objetivos vinculados a la sustentabilidad, haciendo que su aporte sea medible y reconocido. Además, a través del Comité de Reputación Corporativa, integrado por los miembros del Comité de Dirección, el informe cuenta con el compromiso del máximo órgano de gobierno, fundamental para el éxito del proceso.
Otra de las claves ha sido la consulta a nuestros grupos de interés. A través de diálogos presenciales con empleados, proveedores, clientes, referentes de la industria y representantes de las comunidades cercanas a nuestras operaciones, todos los años escuchamos sus expectativas y sugerencias, desarrollando un análisis de materialidad para que nuestras publicaciones sean relevantes para todos los lectores.
Estos diálogos son llevados bajo el estándar AA1000SES, que nos ayuda a sistematizar la consulta, y asegurar la transparencia y participación inclusiva de los grupos de interés. Además, aseguramos la calidad y transparencia de la información publicada a través de un proceso de verificación externa.
Actualmente la tendencia es que las empresas comiencen a reportar, y ya no se concibe que se rinda cuentas únicamente del desempeño económico-financiero. La divulgación del desempeño social y ambiental es fundamental para impulsar una mejor toma de decisiones por todos los stakeholders de la compañía, incluso el mercado de capitales. Reflejo de ello es que Grupo Gas Natural Fenosa desde hace 10 años forma parte del Dow Jones Sustainability Index (DJSI) y del FTSE4Good.
De cara a los próximos años, si bien los desafíos por delante son muchos, estamos convencidos de que los mercados emergente gradualmente seguirán evolucionando para generar mayores oportunidades para negocios sustentables en el marco de la nueva Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, atrayendo este tipo de inversiones y generando valor para todos los stakeholders involucrados.
* Directora de Comunicación y Relaciones Institucionales
Toyota
La sustentabilidad como cultura corporativa
A partir de 2009, la filial argentina publica anualmente su Reporte de Sustentabilidad. “Entendemos que tanto el desarrollo sustentable como la RSE juegan un papel preponderante en el éxito de la organización”, asegura Eduardo Kronberg, gerente general de Responsabilidad Social de la automotriz de origen japonés.

Eduardo Kronberg
“Toyota Argentina reporta sus actividades desde el año 2003. Entre 2003 y 2006, la compañía publicó su Reporte Ambiental, pero a partir del reporte 2006, además de las acciones ambientales desarrolladas se añadieron las actividades relacionadas a los aspectos sociales. A partir de 2009, Toyota Argentina publica todos los años su Reporte de Sustentabilidad. Bajo el principio de mejora continua y con el objetivo de hallar un equilibrio en el seno de la sustentabilidad, a través de la equidad social, cuidado ambiental y desarrollo económico, es que se piensa y desarrolla este reporte. De esta manera, es la principal herramienta de comunicación y gestión de la empresa en el que se demuestra que bajo los pilares del sistema productivo se trabaja día a día en la mejora de la productividad y eficiencia de los procesos tanto en la planta de Zárate como en toda la cadena de valor, proveedores y concesionarios”, explica Kronberg.
“El contenido de nuestro 14ª Reporte de Sustentabilidad toma como guía los principios de la Global Reporting Initiative, reportando más de 20 indicadores de desempeño económico, ambiental, de derechos humanos, trabajo, sociedad, responsabilidad de producto, e incluye actividades desarrolladas por la casa matriz, Toyota Motor Corporation, con impacto en las operaciones a escala local”.
El Reporte de Sustentabilidad 2016 de Toyota Argentina ha sido elaborado de conformidad con la Guía G4 del GRI–, opción “Esencial”. Tiene frecuencia anual desde el año 2003 y abarca el período comprendido entre el 1 de abril de 2015 y el 31 de marzo de 2016.
“Toyota realiza el reporte para reafirmar su compromiso como buen ciudadano corporativo y responsable, atendiendo y escuchando los intereses de los diferentes stakeholders. Además, para reflejar las acciones y programas que la compañía realiza en materia de responsabilidad social y sustentabilidad sobre sus tres ejes de acción: educación para la empleabilidad, ambiente y seguridad vial, bajo las plataformas de trabajo en equipo, mejora continua y respeto por las personas”, afirma el ejecutivo.
Respecto de la creciente visibilidad del nacionalismo y la política anti-globalización, que han puesto en el mismo centro de la escena valores culturales fundamentales: diversidad e inclusión, Kronberg enfatiza los valores de la compañía. “Toyota Way es la base moral para compartir los valores comunes con todas las unidades de negocio alrededor del mundo; sus conceptos trascienden idiomas y nacionalidades y son aplicables en cualquier territorio y sociedad. Desde Toyota pensamos a la sustentabilidad como una condición, no como un negocio. El concepto de sustentabilidad es la forma en la que debemos plantear y llevar adelante la operación. La visión a largo plazo, la ética y transparencia, el cuidado de los recursos, los resultados económicos y el desarrollo de las comunidades son algunos de los lineamientos para alcanzarlo”.
“Para Toyota, orientar su negocio a la sustentabilidad desde una gestión responsable no es una respuesta a una tendencia: es el planteo mismo que guía nuestra actividad desde los inicios, en todos los países en los que operamos. El compromiso con la sustentabilidad integra la cultura corporativa se encuentra en cada una de las áreas de negocio y es parte esencial del modelo de gestión empresarial”.
Macro
Conocer el alcance de impactos y políticas
Se encuentra pronta a lanzar el tercer Reporte Anual Integrado 2016, “que consolida y alinea la información financiera con el desempeño económico, social y ambiental de la entidad, considerando ambas partes inseparables y fundamentales para una gestión sustentable del negocio”, indica Milagro Medrano, gerenta de Relaciones Institucionales y Atención al Cliente.

Milagro Medrano
–Según Peter Bakker, CEO y presidente de WBCSD: “Los informes corporativos todavía no se utilizan en todo su potencial. En el WBCSD, nos imaginamos un mundo donde la medición del capital natural y social y la valoración son una parte integral de la gestión del rendimiento”. ¿Qué opinión le merece esta reflexión? ¿Cuáles son los avances de la empresa en este sentido?
–Con respecto a esta cuestión notamos que a escala nacional aún hay situaciones muy disímiles. Existen empresas en que el proceso de reporte corporativo está dentro de su ADN y lo consideran una parte integrante de la forma en la que miden y gestionan su negocio. Suelen ser las empresas que tienen programas ligados a su “core bussines” y que no ven consideran la sustentabilidad como sinónimo de filantropía. Pero también hay otras que no han tomado la conciencia necesaria y no lo tienen dentro de sus prioridades.
Creemos que si los sistemas no son medibles, reportables y comparables, nos encontramos con una situación difusa en la que no podemos conocer realmente los impactos y alcances de las políticas aplicadas. Por eso es que debemos esforzarnos al máximo para gestionar y transmitir de la mejor manera toda nuestra concepción e inversión de sustentabilidad, de manera de ser claros con nuestros grupos de interés y de aumentar año a año la vara de exigencia que tenemos con nosotros mismos. Estamos convencidos de que solamente mediante un diálogo fluido y una rendición de cuentas clara y transparente podremos entablar vínculos genuinos con nuestros clientes, colaboradores, proveedores, accionistas, medio ambiente y la sociedad en general. En este marco, próximamente el banco lanzará su tercer Reporte Anual Integrado 2016.
En cuanto a la conservación del capital social, trabajamos para estar cerca de nuestros grupos de interés y actores relevantes, mediante el apoyo y acompañamiento a iniciativas sustentables y de alto valor social para beneficio de los públicos externos y la construcción de nuestra reputación e imagen corporativa a escala federal.
En lo que respecta al capital natural, gestionamos nuestro negocio considerando su impacto ambiental directo e indirecto. Utilizamos de forma eficiente nuestro capital natural, protegemos los recursos naturales y apostamos por nuevas tecnologías amigables con el entorno natural que nos rodea.
Telecom
La sustentabilidad es el largo plazo
La compañía realiza una encuesta a más de 1.700 personas en sus grupos de interés y sus respuestas son la base para la realización de los reportes. “Gracias a este relevamiento, comprendimos, por ejemplo, que una de las demandas más importantes de nuestros públicos era el cuidado de los chicos en el uso de las tecnologías”, explica María Constanza Ferrer, gerenta de RSE.

María Constanza Ferrer
“En Grupo Telecom publicamos nuestro Reporte de RSE que da cuenta de nuestro desempeño económico, social y ambiental en el país –con nuestras marcas Telecom, Personal y Arnet–, y en Paraguay, con Núcleo. Se presenta desde 2007 y, actualmente, trabajamos su décima edición sobre el ejercicio 2016”, relata María Constanza Ferrer, gerenta de RSE, Dirección de Relaciones Gubernamentales, Comunicación y Medios de Telecom.
“Estos años significaron un aprendizaje valioso y, sin duda, la curva ha ido en pleno crecimiento. Desde los primeros pasos en los que buscamos instalar a la sustentabilidad como herramienta de gestión en toda la compañía, hasta la etapa actual, en la que esta ya es parte intrínseca de la organización, y contribuye a enlazar los temas más importantes del negocio con aquellos que son primordiales para nuestros clientes y los intereses de nuestros stakeholders”, indica.
“Con el objetivo de que nuestro proceso de reporte de información sea cada vez más exhaustivo, transparente y comprometido, hemos incorporado guías y normas reconocidas a escala mundial, que nos permiten elaborar cada documento en línea con los issues más importantes para la gestión y la comunidad. Así, desde hace dos años, adoptamos los lineamientos de la ISO 26.000 y los principios de la norma GRI G4, que destaca la importancia del análisis de materialidad para definir los contenidos relevantes de gestión responsable. Para ello, realizamos una encuesta a más de 1.700 personas de nuestros grupos de interés y sus respuestas son la base para la realización de los reportes”, cuenta la ejecutiva. Fue a partir de allí que, al verificarse como la principal demanda el cuidado de los chicos en el uso de las tecnologías, se desarrolló el programa “Nuestro lugar”, que trabaja por la concientización sobre el buen uso de internet y de las TIC, promoviendo los derechos de los chicos, también en entornos virtuales.
Hacia un modelo más equilibrado
Las ventajas de la elaboración de reportes son identificadas por Ferrer tanto hacia el interior de la organización como hacia la comunidad. “En el primer caso, trabajar el proceso integral de reporte es una dinámica positiva que involucra al conjunto de la empresa. En Grupo Telecom, el diagrama comprende desde el Directorio, que aprueba anualmente la estrategia de sustentabilidad, hasta los colaboradores, quienes a través del Grupo Operativo, participan en la elaboración del informe desde sus respectivas áreas. Con este compromiso incorporado en cada eslabón, el ejercicio de reporte nos permitió potenciar nuestra gestión al optimizar procesos, analizar y gestionar riesgos, y plantear oportunidades de mejora. De cara a la sociedad, somos conscientes de que día a día crece la demanda hacia el mundo corporativo –como actores sociales relevantes– sobre la importancia de buscar no solo un óptimo desempeño económico sino, además, desarrollar acciones con impacto positivo para la sociedad y su entorno, del que las empresas también formamos parte. Por esto, dar cuenta de nuestras acciones de manera clara y precisa nos permite responder a esa demanda de información y estrechar el diálogo con nuestros grupos de interés. Así podemos delinear puntos de encuentro entre la estrategia de negocio sostenible a largo plazo y los intereses de la comunidad, a través de un aporte de valor social real que contribuya al progreso de la sociedad, al cuidado de los recursos y a la acción responsable en toda la cadena de valor”, explica.
“El modelo de sociedad que pondera ganancias por encima de cualquier posibilidad de desarrollo humano y social, con consumo y descarte irresponsable, ha entrado en crisis y sus fisuras se dejan ver en las demandas que hacen grandes colectivos sociales (Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU, cumbres sobre cambio climático y medio ambiente, etc.) como en los pequeños cambios de hábitos individuales y cotidianos, que empiezan a marcar la diferencia –reflexiona Ferrer–. En este escenario, que puede ser la plataforma de transición para lo que vendrá, las políticas de sustentabilidad cobran mayor relevancia, ya que ayudarán a pensar posibilidades de desarrollo a largo plazo, que persigan mayor inclusión y desarrollo de las personas, dando lugar a un modelo más equilibrado, que logre la ecuación entre la persecución del crecimiento, el aprovechamiento responsable de recursos y una mayor generación de oportunidades”.
Banco Patagonia
Hacer foco en las oportunidades
Desde 2007, elabora anualmente su Informe de RSE en el que da cuenta de su gestión económica, social y ambiental. Desde 2013 lo hace según los lineamientos internacionales GRI G3.1 y el Informe de RSE 2015 fue el primero en elaborarse bajo los lineamientos GRI G4.

Celina Lesta
“Las ventajas más significativas de realizar reportes de RSE o sustentabilidad están relacionadas a la transparencia hacia los grupos de interés y la gestión asociada al reporte”, sostiene Celina Lesta, jefa de RSE de Banco Patagonia.
“La transparencia es la base del diálogo con los grupos de interés y permite generar un vínculo de confianza. En este sentido, muchos actores que son relevantes para las empresas, tales como el sector público, organismos reguladores, instituciones internacionales de crédito, inversores, entre otros, tienen en cuenta los reportes de RSE”. Además, asegura la ejecutiva, “el informe de RSE permite tener una visión global de la gestión de sustentabilidad de la compañía y detectar oportunidades de mejora para implementar. Por lo tanto, no debe ser entendido solamente como una instancia de comunicación sino que el proceso debe ser aprovechado para mejorar la gestión”, sostiene.
–Según Peter Bakker, CEO y presidente de WBCSD: “Los informes corporativos todavía no se utilizan en todo su potencial. En el WBCSD, nos imaginamos un mundo donde la medición del capital natural y social y la valoración son una parte integral de la gestión del rendimiento”. ¿Qué opinión le merece esta reflexión? ¿Cuáles son los avances de la empresa en este sentido?
–El camino hacia la sustentabilidad nunca llega a su fin, ya que siempre se pueden seguir mejorando procesos e innovando para lograr un impacto positivo.
En este sentido, en Banco Patagonia a partir de la incorporación de la metodología GRI G4 realizamos un proceso de definición de los aspectos materiales (económicos, ambientales, sociales y de gobierno corporativo) con mayor impacto en el negocio e influencia en nuestros grupos de interés. El análisis de materialidad resultante de este proceso fue muy interesante ya que nos permite no solo mejorar el enfoque del reporte sino también trabajar hacia el interior de la organización.
–Todo indica que hay un cambio fundamental en el escenario geopolítico mundial. Pronostican el fin de una economía global abierta y de entidades como la OMC. En ese contexto, ¿cómo pueden ser afectadas las empresas y la misma noción de sustentabilidad y responsabilidad social?
–A la vez que existen muchos cambios en el escenario global, también hay muchas personas trabajando en distintos sectores para lograr un desarrollo sustentable. A escala internacional se demuestra, por ejemplo, con el nivel de adhesión que lograron los nuevos Objetivos para el Desarrollo Sostentible.
La apuesta para mantener el rumbo hacia la sustentabilidad es enfocarse en estas oportunidades y en el camino recorrido que no se puede desandar. Hay muchas personas interesadas en continuar con este trabajo, así como herramientas y propuestas desarrolladas para ayudar a los ciudadanos, las empresas y los Gobiernos a alcanzar un desarrollo sustentable. El tema está en agenda.
Un gran desafío que tenemos desde las empresas para promover la sustentabilidad es poder pensar de manera innovadora apostando al desarrollo de nuevos emprendimientos. Es por ello, que en Banco Patagonia, uno de nuestros ámbitos de inversión social es el emprendedurismo y el desarrollo local.
Crear empresas eficaces, responsables y transparentes
Por Lucas Utrera*

La agenda de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) ha generado nuevos mandatos éticos para intensificar las contribuciones de las empresas al combate de la triada pobreza/desigualdad, cambio climático y deterioro ambiental del planeta. El ODS 16 menciona explícitamente la meta de “Crear instituciones eficaces, responsables y transparentes a todos los niveles”. Este mandato refleja el creciente interés de las empresas, pymes y grandes, en pensar y definir sus estrategias de sustentabilidad, teniendo como referencia la agenda de los ODS. Esto significa salir de acciones puntuales para avanzar hacia una gestión profesional que minimice los riesgos e impactos negativos del negocio, mientras potencia aquellos positivos en beneficio de las comunidades y el planeta. También requiere una ardua tarea en términos de management con el fin de mover la Gerencia de Sustentabilidad desde la periferia hasta el centro del negocio, junto a un Directorio más consolidado en la toma de decisiones de aspectos sociales y ambientales.
El proceso estará completo solo si suma uno de los desafíos centrales de la gestión sustentable: la definición de métricas de valor para el negocio. Cómo hacer tangible lo intangible, cómo mostrar los verdaderos impactos de una organización en términos económicos, productivos, sociales, humanos, ambientales y de innovación. Estos son los famosos “Seis capitales” a los cuales hace referencia la metodología de Reportes Integrados, una tendencia incipiente en América latina y a la cual venimos acompañando con entusiasmo.
Es necesario brindar información a los inversores para su toma de decisiones futura, pero también, medir y comunicar a los distintos grupos de interés el desempeño económico, social y ambiental de la organización. En ese sentido, los tradicionales reportes de sustentabilidad basados en la metodología de la Global Reporting Iniciative (GRI) conectados a ISO 26.000 y los Principios de Pacto Global continúan siendo adoptados por cada vez más empresas en la región.
Los recientes casos en América latina de corrupción empresarial y de ocultamiento de impactos ambientales significativos impulsan aún más a las empresas a rendir cuentas y transparentar la gestión. La calidad de la información pasa a ser el aspecto esencial para la credibilidad de un reporte de sustentabilidad, así como la sensatez de toda empresa para informar sobre aquellos aspectos más controvertidos de su gestión. En el escenario de tensiones y complejidades de la sustentabilidad, las empresas generan valor y riqueza, pero también cuestionamientos y equivocaciones, el desafío es medir para plasmarlas de manera equilibrada en el reporte de sustentabilidad.
También se requiere un mayor dinamismo en términos de la comunicación de la información. Un gran interrogante de los gestores de la sustentabilidad es sobre quiénes leen los tradicionales reportes de sustentabilidad. Las empresas aún son poco proactivas en comunicar a los distintos grupos de interés con una estrategia planificada. Segmentar información del reporte y diseñar canales adecuados según el destinatario son aspectos relevantes para tener esa retroalimentación tan valiosa y necesaria a los fines de consolidar el análisis de materialidad en cada nuevo ciclo de reporte.
La agenda de los ODS contiene numerosos mandatos convenidos por toda la humanidad que inciden directamente en la gestión empresarial. El desafío es que puedan convertirse en acciones transformadoras. Si queremos empresas eficaces, responsables y transparentes, las decisiones de negocios deberán transitar por los intrincados caminos de la producción limpia, el consumo responsable, la gestión de residuos, la inclusión de la mujer, el trabajo decente, el cuidado de empleados y comunidades, por mencionar solo algunos de los nuevos mandatos prescriptos por los ODS.
Poder medir con precisión y rendir cuentas a los distintos grupos de interés son aspectos esenciales de esta nueva ética del cuidado que llama a los negocios a comprometerse y trabajar activamente por el bienestar y la armonía en cada rincón del planeta, colocando como criterio central el valor de la persona humana y la preservación del planeta.
*Director de Sustentabilidad de SMS Latinoamérica
Natura
Rendir cuentas en toda la cadena
Los desafíos siguen estando hoy en la medición. La compañía realizó un importante avance en esta materia con la publicación de un estudio que contabiliza el valor económico y social del impacto del negocio en el medio ambiente, indica José De Carli, gerente de Asuntos Corporativos.

José de Carli
“Este estudio constituye en una herramienta de gestión, que orienta las decisiones estratégicas de la empresa para una evaluación más efectiva del Triple Bottom Line (impactos económicos, sociales y ambientales)”, enfatiza el ejecutivo.
“Otra importante evolución con el paso del tiempo fue la digitalización del relatorio –explica–. Hoy no tenemos una ‘versión digital’ del informe, la principal pieza de comunicación es justamente digital, y está diseñada y producida específicamente para ese canal, con contenidos ampliados y audiovisuales y links interactivos a documentos relacionados. El contenido completo del documento es público y abierto y puede accederse desde la web”.
Desde 2000, Natura produce su informe anual de sustentabilidad. Se trata de una publicación que compila los resultados financieros, impactos sociales y ambientales. “Combinan dos directrices de divulgación de resultados, Global Reporting Initiative en su versión G4 para indicadores económicos, sociales y ambientales; y el International Integrated Reporting Council (IIRC). Ambos modelos tienen como objetivo garantizar transparencia en prestación de cuentas a los públicos de relación de la empresa”, indica.
“El relatorio nos permite ofrecer, en una única pieza, una visión integrada del desempeño de las múltiples facetas de la vida de la compañía y de nuestra contribución a todos los públicos con los que nos relacionamos. Y esta visión está relacionada no solo con el año del que rendimos cuenta, sino que cada vez más incluye una perspectiva de los desafíos actuales y futuros de la compañía. Además, el informe tiene como base la rendición de cuentas sobre los compromisos públicos a 2020 y 2050 asumidos en nuestra Visión de Sustentabilidad lanzada en 2014, transversales a toda la empresa en tres pilares fundamentales: marcas y productos, red de relaciones, y gestión y organización”, explica De Carli.
–¿Cuál considera es la importancia de medir los impactos de la actividad más allá de la propia compañía, involucrando a toda la cadena de valor?
–Natura trabaja con proveedores que están alineados con su manera de hacer negocios. Actualmente nos relacionamos aproximadamente con 5.000 y estimamos su consumo de energía y emisiones para poder compensarlas.
Esta iniciativa, única en una empresa de cosmética en el mundo, es impulsada desde hace 10 años en el marco del Programa Carbono Neutro, que tiene como fin reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en la atmósfera. Involucra el monitoreo de los indicadores de emisión de los proveedores que participan en toda la cadena productiva para, posteriormente, diseñar y ejecutar medidas para reducirlos. El proyecto ha impulsado la innovación como la creación de nuevos empaques y repuestos, la sustitución de ingredientes y la definición de parámetros para el desarrollo de nuevos productos.
Como parte del compromiso de Natura en la gestión sustentable, implementamos una metodología de inventario que nos permite contabilizar y reportar nuestros impactos ambientales, incluyendo el de los proveedores, considerando 18.000 coeficientes, desde la etapa del cultivo hasta que el producto final es consumido por las personas. Esta contabilidad ambiental nos permite visualizar resultados por su etapa en la cadena, por unidad regional, por materia prima, por subcategoría de producto y por tipo de impacto. Este estudio nos permite reexaminar junto con nuestros proveedores los procesos de innovación, distribución y producción para hacerlos cada vez más sustentables.
–”La divulgación de información no financiera sobre la base de datos fiables, junto con la información cualitativa y contextual, impulsa una mejor toma de decisiones y ayuda a proporcionar una valoración más precisa de las empresas que llevan a una asignación más eficiente de las inversiones del mercado de capitales. Esto es fundamental para conducir la transición hacia una economía sostenible y baja en carbono”, sostiene Peter Bakker, presidente de WBCSD. ¿Cuál es su opinión respecto de este tema? ¿Están las empresas argentinas alineadas en este sentido?
–Hoy, afortunadamente, cada vez más empresas están demostrando avances importantes en materia de gestión sustentable, ya sea con resultados actuales o firmes compromisos a futuro. El mundo está transitando un proceso de cambio, hay una conciencia cada vez más generalizada de que ni las empresas podemos seguir produciendo ni las personas consumiendo como si los recursos fuesen ilimitados.
Por ejemplo, uno de los principales desafíos ha sido poder expresar cada vez con mayor claridad y transparencia la correlación entre los impactos económicos, sociales y ambientales generados por nuestras decisiones de negocio. Un importante avance en este sentido fue haber comenzado a utilizar una metodología de medición conocida como EP&L (Ganancias y Pérdidas Ambientales, por sus siglas en inglés), el primer caso a escala mundial en la cosmética. Es una metodología que nos permite valorar económicamente los impactos ambientales, agregando un alto componente de transparencia a nuestras comunicaciones tanto a inversores como a consumidores en general.
Cambio de paradigma
Cada vez más, las personas se informan e interesan en el comportamiento de las empresas que proveen productos y servicios. Les importa la calidad del producto y su precio, pero también su origen, su fabricación, y el impacto que tiene sobre el planeta.
Para Natura sustentabilidad significa crear y comercializar productos y servicios que promuevan el bienestar de las personas pensando en las generaciones futuras. La sustentabilidad es nuestra esencia, una forma de hacer y un modelo de gestión que se materializa permanentemente en nuestras marcas, productos y relaciones.
Y no menos importante en términos de sustentabilidad es el mensaje que damos desde la industria: tenemos una responsabilidad muy grande en relación con las ideas y estereotipos asociados a la belleza. En Natura creemos firmemente que la belleza, como aspiración y deseo legítimo y genuino del ser humano, debe ser liberada de prejuicios y manipulaciones. Como industria, sin duda aún tenemos un camino por recorrer en este sentido, que tiene que ver ni más ni menos con la sustentabilidad social y cultural del contexto en el cual nuestros productos se consumen.
Creemos que las empresas deben ir más allá de reducir o mitigar impactos: deben convertirse en agentes que mejoren el ambiente y la sociedad a su alrededor. Las marcas que no entiendan esto y no gestionen su negocio con esta mirada probablemente sean cada vez menos relevantes para los consumidores en los próximos años.
Tenemos la firme convicción de que sustentabilidad no debería ser opuesto a accesibilidad. Uno de los grandes desafíos de la sustentabilidad es ganar escala: precio y sustentabilidad no deberían ser excluyentes. En este punto hay un gran camino por recorrer en la relación con el consumidor: la sustentabilidad tiene que hacer sentido para aquellos que consumen. De ahí nuestra responsabilidad como empresas y marcas de ser transparentes y creíbles, y transformar a nuestros productos en medios de comunicación, educación y compromiso, que den información al consumidor para que en su elección –además de beneficios funcionales y experiencias sensoriales diferenciadas (táctiles, olfativas, visuales)– evalúe también el impacto que genera para el medio ambiente.
Kimberly-Clark
Un trabajo interdisciplinario
Desde 2009, presenta un reporte de sustentabilidad local con los resultados del desempeño económico, medio ambiental y social de la compañía. “Así nos medimos constantemente, tanto en alcance de nuestros objetivos y logros internos, como en materia de transparencia hacia el exterior, cuenta Fernando Hofmann, director de Asuntos Legales y Corporativos de LAO-Región Austral.

Fernando Hofmann
“Además, incorporamos nuevos indicadores y progresos para mejorar la gestión de nuestra estrategia de sustentabilidad. Este año lanzamos nuestro noveno reporte –y a futuro lo seguiremos haciendo con otras ediciones– y hemos identificado grandes avances respecto al primero. El Reporte de Sustentabilidad 2016 fue elaborado ‘de conformidad’ con la Guía G4 del Global Reporting Initiative, opción ‘Exhaustivo’. Utilizamos el servicio ofrecido por esta organización, GRI Materiality Disclosures Service, y la herramienta SDG Compass, una guía que ofrece cinco pasos para que las organizaciones maximicen su contribución a los ODS”, explica Hofmann.
–¿Cuáles son las ventajas y las desventajas –si existieran– de realizar los reportes de RSE o sustentabilidad?
–Existen más ventajas que desventajas a la hora de realizar reportes. Son un punto de partida para avanzar en una gestión de sustentabilidad, para tener control en ella y poder observar y corregir los ejes de trabajo para su posterior evolución y mejora continua año a año. De este modo, favorece a la hora de establecer estándares más altos y buscar la profesionalización.
A su vez, nos dan la oportunidad de capitalizar nuestra forma de pensar y comportarnos, trayendo consigo el inicio de un proceso de conocimiento y de beneficios que muchas veces se ven reflejados en la planificación de nuestro negocio en la Argentina.
Bajo esta perspectiva, también se incentiva la labor en equipo, ya que involucra a diferentes sectores de Kimberly-Clark. Lo hacemos a través de un Comité de Sustentabilidad que está compuesto por un grupo interdisciplinario de representantes de la zona Austral (Argentina, Chile y Paraguay): Recursos Humanos, Marketing, Trade, Asuntos Corporativos y Legales, Operaciones, Calidad y Desarrollo, Distribución, y Supply Chain. Así, conducidos por nuestro sector de Asuntos Corporativos, desarrollan un trabajo en conjunto velando por la implementación y desarrollo de la estrategia de sustentabilidad en la compañía. Y consolidando a la sostenibilidad, como un valor transversal a todas las áreas de trabajo.
Según Peter Bakker, CEO y presidente de WBCSD: “Los informes corporativos todavía no se utilizan en todo su potencial. En el WBCSD, nos imaginamos un mundo donde la medición del capital natural y social y la valoración son una parte integral de la gestión del rendimiento”. ¿Qué opinión le merece esta reflexión? ¿Cuáles son los avances de la empresa en este sentido?
La elaboración de reportes de sustentabilidad todavía está en desarrollo. Si bien hace más de 15 años viene tomando cada vez más valor, tal como comentaba previamente, lleva consigo un largo proceso de aprendizaje y evolución donde cada compañía debe mirarse internamente e ir adoptando nuevas medidas y ajustes a partir de los resultados de cada evaluación. Una valoración que también debe ir modificándose a los nuevos parámetros de la sostenibilidad, donde se observa este valor como una parte elemental para la gestión de cada parte de la compañía, que asimismo deben trabajar en conjunto y hacia una misma visión. Si bien actualmente no están potenciados los informes a su máxima expresión, creo –y realmente observo– que hay muchas expectativas para alcanzar lo propuesto por Bakker y el WBCSD. No estamos lejos de ello, simplemente transitando ese camino.
Desde Kimberly-Clark tenemos nueve años de experiencia en reportes de este tipo, y hemos logrado grandes avances en el último tiempo respecto a nuestros inicios. Por eso, a lo largo de los años hemos sido más exhaustivos con los indicadores de medición, para obtener resultados confiables y de calidad.
Con este lineamiento, en nuestros reportes adoptamos como referentes algunos parámetros de labor: la ISO 26000, una herramienta que nos ofrece una guía de cómo implementar e integrar mejores prácticas de responsabilidad social en nuestra gestión cotidiana; Global Reporting Initiative (GRI) – SDG Mapping Service, con el propósito de profundizar nuestro compromiso con los Objetivos de Desarrollo Sostenible… Estos parámetros nos permiten mejorar.
–Ante esta nueva realidad global, los líderes de las grandes empresas van a tener que repensar sus metas estratégicas, sus métodos con los empleados y su llegada al público; sobre todo si operan en varios países, emplean extranjeros, se expanden o pagan impuestos en muchos lugares. ¿En qué dirección es más probable que se incline ese pensamiento renovador?
–En los parámetros de esta nueva realidad global creo que la innovación va a dirigirse a que las empresas inviertan y renueven su compromiso de crecer de forma sustentable, económica, social y medioambientalmente en las comunidades en las que operan. En esta realidad global, va a ser también fundamental tener como prioridad en las corporaciones la ética y la trasparente que guíe todo el accionar
En esta nueva visión, los “global goals” van a regir el quehacer diario desde todos los aspectos. Y el “ser”, “hacer” y “decir” va a estar bajo la misma lupa.
En este nuevo aniversario, nos tomamos el tiempo de reflexionar y proyectar nuestro futuro, nuestros próximos años apostando y prosperando en el país. Por ello, nuestras expectativas se dirigen a continuar asumiendo este gran desafío: el trabajo en la ética y la transparencia, en iniciativas con los nuevos ODS y alianzas que los favorezcan, el acercamiento y escucha a nuestros consumidores y en la generación de redes de trabajo donde se creen ámbitos de colaboración y de co-creación en todos los niveles de la empresa y con todos nuestros stakeholders.
La creación de valor compartido, nuestra meta
Por Agustina Zenarruza*

En Pan American Energy (PAE) trabajamos sostenidamente en una estrategia sustentable, caracterizada por la visión a largo plazo, la innovación constante, la exploración y producción responsable de petróleo y gas, el compromiso con las comunidades cercanas a la operación y el cuidado por las personas y el ambiente.
Bajo este enfoque, desde 2002 contamos con un Sistema de Gestión Ambiental, certificado bajo la Norma ISO 14001, que abarca todo el ciclo de vida de las operaciones, desde el diseño y la definición de los proyectos. Así, logramos una gestión eficiente del uso de los recursos naturales y del tratamiento de los residuos y estrictos cuidados durante nuestro trabajo que nos permiten conocer de forma exhaustiva el entorno en donde operamos. Por eso, realizamos estudios de línea de base que nos ayudan detectar cambios, generar proactivamente acciones e incorporarlas a la gestión ambiental. También colaboramos en proyectos que buscan preservar especies en peligro de extinción con el objetivo de estimular el respeto por la biodiversidad.
La sustentabilidad es el marco con el que vemos nuestro negocio. Nos indica el horizonte y nos guía en el trabajo diario, atravesando a todos los proyectos que emprendemos. Nos desafía a transformar nuestro quehacer en valor compartido con la sociedad, el ambiente y nuestros grupos de interés.
Desde nuestros inicios, asumimos un rol potenciador de las comunidades en las que trabajamos. Nos concentramos en soluciones concretas que respondan a las necesidades inmediatas y en proyectos de largo plazo que resuelvan problemas de fondo en las comunidades en donde vivimos y operamos. Para alcanzar esta meta, nos vinculamos con la comunidad y con distintas organizaciones gubernamentales y no gubernamentales, generando las herramientas y desarrollando las capacidades necesarias para transformar la realidad.
En esta línea, en 2016, realizamos nuestro primer balance social. Así, desarrollamos una herramienta que fortaleció canales de interacción dentro y fuera de la empresa, con nuestra cadena de valor y los grupos de interés para ratificar su compromiso con la comunidad e identificar los próximos desafíos. Sin dudas, esta primera experiencia fue positiva para medir impactos económicos, sociales y ambientales de nuestra actividad y contribuir a la mejora continua, trabajando en procesos cada vez más eficientes.
Por eso, en PAE sostenemos que la energía que producimos nos pone en acción. Transforma, potencia y genera nuevas oportunidades para las comunidades cercanas a nuestra operación y más desarrollo para todos los argentinos.
*Líder en Responsabilidad Social Empresaria, Pan American Energy

