Se consolida la tendencia a producir informes anuales de sustentabilidad, donde prima la transparencia y crece la predisposición de las empresas a reportar acciones vinculadas al medio ambiente, a las iniciativas sociales, y también a integrar los reportes con resultados económicos y financieros.
Una corriente propicia mayor regulación estatal en este campo, y otra la rechaza con firmeza destacando el carácter voluntario de la actitud empresarial.
Otra vez, como en años anteriores, destacamos “Los 10 sobresalientes” –informes que tras ser evaluados merecen ser distinguidos–.
Como telón de fondo, se perciben dos conceptos muy claros: uno, cada vez más, la RSE se centra en temas como ambiente, sustentabilidad, energías alternativas, tecnologías limpias, además de los clásicos enfoques sociales (con educación y salud incluídas). El otro: avanza la práctica de rendir cuentas sobre lo que se hace en la materia.
El lector encontrará también una actualización de “the state of the art” en el mundo; los testimonios de directivos que producen informes o que tienen programas muy especiales de RSE, y finalmente otro listado de protagonistas con programas interesantes o novedosos de RSE.
