“Argentina es un mercado muy importante para nosotros por su historia y tradición en el uso de herramientas. Esta inversión es un primer paso para reafirmar nuestra posición de liderazgo con nuestras marcas en cada segmento del mercado”, comentó Javier Gómez, gerente General de Stanley Black & Decker Argentina.
Esta importante inversión se dividirá en dos etapas. Una primera, donde se invertirán $80 millones en dos fábricas de accesorios industriales, que se complementará con una segunda inversión de $20 millones en los próximos dos años, en tecnología para ampliar la capacidad de producción y agregar nuevas unidades de negocio.
En la planta de discos abrasivos ubicada en Villa Mercedes, provincia de San Luis, la empresa producirá accesorios especializados con la marca Dewalt, para el mercado industrial; y accesorios Black & Decker para abastecer el segmento de usuarios profesionales. Por otro lado, en la planta ubicada en Villa Ballester, provincia de Buenos Aires, se fabricarán ruedas abrasivas de alto valor agregado para la industria metalúrgica y autopartista.
“Esta inversión generará nuevas oportunidades de negocio para la empresa y sumará 120 trabajadores al equipo Stanley Black & Decker. Nuestro principal objetivo será sustituir la importación de estos productos para abastecer al mercado local y contar con la plataforma de producción necesaria para exportar a Brasil, Chile, Colombia, Paraguay y Uruguay”.