Los nuevos requisitos de estas normas cambian el punto de vista de la gestión de las organizaciones, orientándolas principalmente al pensamiento basado en riesgos e incorporando la visión del contexto de la organización y partes interesadas como aspectos sobre los cuales sustentar el análisis para la planificación de la gestión.
Se busca así generar mayor valor agregado y ampliar el rango de planificación de la gestión a modo de obtener productos y un desempeño ambiental que no solo satisfagan las necesidades de los clientes sino también al contexto donde se opera y a los diferentes actores vinculados con las actividades y sus productos.
Otro aspecto importante en la nueva visión de la gestión es un rol más preponderante del líder, quien más allá de asumir compromisos y responsabilidades se pone al mando de la gestión de cambio.
Las nuevas versiones de las principales normas de sistemas de gestión de ISO están pensadas para apoyar la gestión de las organizaciones en los próximos 20 años y buscan romper con los mitos relacionados con la generación de burocracia y conceptos obsoletos de aseguramiento de calidad. Buscan dinamismo en la gestión y logros en los resultados planificados.