En el marco del mes del corazón, Philips Argentina donó un Desfibrilador Externo Automático (DEA) a la Fundación Margarita Barrientos para poder salvar vidas ante casos de paro cardíaco súbito. Muchos de estos paros cardíacos ocurren fuera del hospital. Se estima que el 90% de las víctimas que sufren de un paro cardíaco fuera del hospital, muere principalmente porque la asistencia no llega a tiempo o porque no tiene acceso a un DEA.
La Fundación Margarita Barrientos ofrece comida de forma gratuita a más de 2.000 niños, madres y ancianos. También, dispone de una guardería, un centro de día para abuelos y un centro de salud donde se ofrece atención médica y charlas de manera gratuita. En esta línea y para proteger la vida de todos los que asisten día a día, Philips hizo entrega del DEA y realizó un entrenamiento a varias personas de la comunidad y centro de salud, en RCP y uso del desfibrilador externo automático.
Un paro cardíaco puede ocurrirle a cualquier persona en cualquier lugar y a cualquier edad: ocurre inesperadamente, la víctima deja de respirar y su corazón deja de latir. En estos casos la muerte es inminente. La Reanimación Cardio Pulmonar (RCP) es muy importante, pero por sí sola no hará que su corazón vuelva a latir. Para restituir el latido, se necesita la descarga de un Desfibrilador Externo Automático y el tiempo es determinante. Idealmente, se debe administrar la descarga del DEA dentro de los 3 o 5 minutos de ocurrido el paro.
Philips es líder global en Desfibriladores Externos Automáticos con más de 1.500.000 unidades. Estos equipos fueron diseñados para que cualquier persona los pueda usar, incluso sin entrenamiento previo, gracias a que incluyen instrucciones de voz que guían a la persona en el paso a paso. El DEA intuitivamente evalúa el ritmo cardíaco de la víctima y determina si es o no apropiado dar una descarga eléctrica. Si el dispositivo determina que no se debe aplicar el shock, no se podrá administrar, ni siquiera pulsando el botón de descarga, demostrando así ser muy seguro.