Un elemento esencial en el área de la responsabilidad para con el clima y el medio ambiente es la inversión en aviones más silenciosos y más eficientes. Durante los últimos años, las aerolíneas del consorcio ya han comenzado a operar numerosos modelos de aviones nuevos que ahorran combustible, tales como el Airbus A380 o últimamente el Boeing 747-8.
A partir de fines del año 2013, Lufthansa Cargo recibirá los primeros dos aviones de carga altamente eficientes del tipo Boeing 777F. También la compra decidida en marzo por el Concejo de Supervisión de 108 nuevos aviones es un gran paso para el medio ambiente y para los vecinos de los aeropuertos, afectados por las emisiones de ruido. En cuanto al consumo de combustible, estableció un récord de eficiencia ya que el año pasado, las aerolíneas de pasajeros del consorcio utilizaron en promedio solo 4,06 litros por pasajero por cada 100 kilómetros. Ello corresponde a una reducción de casi 3% en comparación con el año anterior.
Además de la inversión en aviones modernos y más silenciosos, ahorra costos en los procesos de rodamiento y remolque de los aviones en tierra y el funcionamiento de otros medios de transporte relacionados con las operaciones en tierra en el aeropuerto. A futuro los aviones ya no recorrerán el camino hasta la pista de despegue, hacia la posición de estacionamiento en el edificio terminal o hacia el hangar con ayuda de sus turbinas, sino mediante la utilización de remolques de aviones de accionamiento eléctrico, o a través de un motor eléctrico integrado al avión. Se están realizando las pruebas respectivas.