La economía argentina finalizó 2021 con una notable reactivación en la mayoría de sus sectores productivos. Para la gran mayoría de las ramas industriales, el último mes de 2021 fue el mejor diciembre en al menos cuatro años.
En concreto, en diciembre del año pasado la actividad industrial alcanzó el mayor nivel de actividad desde abril de 2018 y tuvo una suba del 13,3% frente al mismo periodo de 2019 y del 7,6% en comparación con el 2020. A su vez, de acuerdo a los datos de la secretaría de Energía, en el segmento hidrocarburífero el último mes del año pasado se registró el mayor nivel de producción de petróleo desde 2011 y de gas, el más alto desde 2008.
El último Informe de Panorama Productivo del Centro de Estudios para la Producción (CEP-XXI) del Ministerio de Desarrollo Productivo destacó que de 14 sectores industriales, 12 consumieron más energía en diciembre de 2021 que dos años atrás. Entre ellos se destacaron metales básicos (la producción de acero creció 31,4% frente a 2019 y tuvo el mejor diciembre desde 2014), automotriz (un alza del 37,2%, y con 39.849 unidades tuvo el mejor diciembre desde 2016), y metalmecánica (mejoró 23,2%).
En la comparación mensual desestacionalizada frente a noviembre, la industria registró una suba del 0,3%. De este modo, en diciembre la industria alcanzó el mayor nivel desde abril de 2018. Asimismo, de 1.061 plantas industriales, el 61,5% consumió más energía en diciembre de 2021 que en mismo período de 2019.
Auge de la industria automotriz
Uno de los sectores emblema del crecimiento industrial es el automotriz: terminó 2021 con una suba del 38,1% respecto a 2019. En un contexto global en el cual la mayoría de los países disminuyó su producción automotriz producto de la escasez global de semiconductores, la recuperación argentina fue la más acelerada de todas en este sector. La mejora se dio tanto por el cambio en el mercado interno, en donde los patentamientos de origen nacional pasaron de representar el 29,9% del total en 2019 a superar el 50% en 2021, como del mercado externo, con exportaciones creciendo 15,6% contra 2019 y con un récord histórico en pickups.
También se recuperó con fuerza la industria de maquinarias y equipos, gracias a que los patentamientos de maquinaria agrícola, vial e industrial de origen nacional fueron los más altos desde al menos de 2014.
Otras industrias también tuvieron un mejor desempeño en Argentina que en otros países. Un ejemplo de ello es alimentos y bebidas, un sector que en los primeros 11 meses del año pasado creció 5,9% comparado a 2019, por encima de países como Brasil, Chile, España, Francia, Italia, India, México, Alemania, Estados Unidos y Japón. Lo mismo puede decirse de prendas de vestir, textil, cuero y calzado, que creció en Argentina contra 2019 cuando en la mayoría de los países registró contracciones.
Se recupera el mercado de trabajo
La reactivación económica se ha plasmado en el mercado de trabajo. En el tercer trimestre de 2021 -cuando la tasa de desocupación llegó al 8,2% de la población económicamente activa, el valor más bajo en más de tres años– hubo una creación neta de 250.000 puestos de trabajo contra el segundo trimestre en la medición desestacionalizada, según estimaciones del CEP-XXI en base al INDEC. Todas las categorías de empleo aumentaron en valores absolutos frente a 2020. La recuperación fue más marcada en los empleos más precarios (informales y no asalariados), que habían sido los más golpeados en 2020 por la pandemia.
Por su parte, el consumo también reflejó cifras alentadoras, ya que las ventas con Ahora12 de diciembre fueron superiores a las del mismo mes de 2020 y 2019, en un 25,4% y 4,0% respectivamente.
También crecieron las exportaciones
El sector externo también finalizó 2021 con una fuerte recuperación. Las ventas de productos argentinos al exterior alcanzaron los US$ 77.934 millones, la cifra más alta desde 2012. Si bien la mejora de los precios de exportación fue importante en esa recuperación, también la suba de las cantidades exportadas marcaron diferencia. En efecto, 2021 fue el segundo año de mayores cantidades exportadas de la última década, solo por detrás de 2019, cuando las condiciones climáticas habían sido más favorables para el agro.
Las importaciones también terminaron con una clara recuperación, producto de la reactivación productiva: en todo 2021, los volúmenes importados fueron 16,2% superiores a los de 2019. Lo que sí cambió fue el perfil de las importaciones, con un mayor protagonismo relativo de insumos y maquinarias para la industria y una menor relevancia de bienes finales. Las importaciones directamente ligadas a la producción (bienes intermedios, bienes de capital y sus partes y piezas) representaron el 79,2% del total en 2021, la cifra más alta desde 1999. Adicionalmente, en valores absolutos, las cantidades importadas de insumos intermedios fueron las mayores de la historia.
Por último, 2021 también finalizó con un dinamismo en las inversiones. En diciembre, las importaciones de bienes de capital -termómetro de la inversión- crecieron 95,3% frente al mismo mes de 2019 y 45,5% en comparación con 2020. En tanto, en noviembre, la construcción creció 15,2% frente a noviembre de 2019 y registró su mayor nivel para tal mes desde al menos 2012.