Con motivo de la emergencia sanitaria del Covid-19, el Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA) abrió un aula virtual por cada curso de la universidad. Por el momento, se registró un número máximo de 1.030 salas virtuales activas y 3.249 alumnos, docentes y colaboradores conectados.
Desde hace ya cuatro años el ITBA realiza jornadas de innovación educativa para capacitar a sus docentes de manera virtual.
“En el ITBA perseguimos una filosofía en donde la innovación educativa y la transformación digital son un pilar fundamental. Pensar que un estudiante aprende solo si está enfrente del profesor es desperdiciar un montón de oportunidades. Nos propusimos tener las herramientas necesarias para poder aprovechar el tiempo, favorecer el pensamiento crítico y potenciar el desarrollo profesional y personal.”, expresó Javier Apat, director de TI del ITBA.
En 2016, la universidad comenzó con el proceso de transformación e innovación educativa. En ese marco implementó el plan estratégico “Reboot de TI” para renovar la conectividad completa de sus tres sedes. Además, lanzó el Campus ITBA basado en la plataforma Blackboard, donde cada curso de la universidad posee un aula virtual y varias herramientas de colaboración y videoconferencia.
Por otra parte, se implementó una aplicación móvil, donde se refleja la actividad académica del alumnado y se encuentran funcionalidades para facilitar la experiencia en la universidad. A su vez, para lograr un crecimiento rápido en servicios y mejoras, se adoptó un enfoque cloud first, que privilegia el uso de servicios informáticos en las diferentes nubes públicas por sobre la compra de infraestructura física.
También se trabajó con los equipos de gestión de la universidad: los sistemas administrativos fueron renovados para poder acceder de forma online para pagar, cobrar y liquidar sueldos desde cualquier ubicación.
De esta manera, el ITBA brinda un salto cualitativo al futuro como parte de un proceso fundamental y necesario en una época de transformación digital.
Para Nicolás Bacqué, Director General de Desarrollo Institucional de la Universidad, como en toda gran transformación es clave el rol de las personas: “Por supuesto que la tecnología es muy importante; aunque tampoco debemos olvidar que los docentes, alumnos y colaboradores, con su creatividad, flexibilidad y compromiso, son los que permiten que la digitalización pueda llevarse adelante”.
