<p>Con el precio del petróleo crudo Brent cercano a US$ 100 por barril, las empresas están buscando vehículos de combustible alternativo para poder reducir los costos. Una nueva investigación del International Business Report (IBR) de Grant Thornton reveló que alrededor de uno de cada cuatro empresarios ha introducido o está considerando la introducción de vehículos de combustible alternativo a su negocio, y que la mayoría lo hace en un intento de mitigar el precio del petróleo.<br />
<br />
24% de las empresas a nivel mundial ha introducido o está considerando la introducción de vehículos de combustible alternativo. Existe una evidente división entre mercados maduros y emergentes, con 28% de las empresas en el G7 al menos considerando la adopción de este tipo de vehículos, en comparación a solo 15% en las economías BRIC.<br />
<br />
En América latina la cifra asciende a 24%. Brasil muestra el porcentaje regional más alto con 31%, seguido de Perú (27%), Chile (20%) y México (15%). Por su parte, la Argentina registra uno de los menores porcentajes a escala mundial, con 9%.<br />
<br />
El mayor impulsor de las empresas a buscar vehículos de combustible alternativo es el precio del petróleo, que ha sido citado por 69% de los encuestados a nivel mundial. Otras razones nombradas son la desgravación fiscal (55%) y la gestión de los costos en general (62%). Además, las empresas son cada vez más conscientes del impacto medioambiental de sus flotas de vehículos: 58% de los empresarios citó la salvación del planeta como una vía hacia la adopción de vehículos de combustible alternativo.<br />
<br />
Daniel Taylor, socio y líder del sector automotor de Grant Thornton en Reino Unido, dijo: “Con los Estados Unidos y la Unión Europea presionando para la aplicación de sanciones contra Irán, el cuarto productor más grande de petróleo del mundo, parece poco probable que los precios en las estaciones de servicio bajen en un futuro cercano.<br />
<br />
“Por lo tanto, muchas organizaciones dinámicas están buscando determinar si el cambio de sus flotas por vehículos de combustibles alternativos podría ahorrarles costos, lo que les permitiría liberar recursos que podrían utilizarse para intentar expandir sus operaciones. Y, por supuesto, cambiar a combustibles más 'verdes' potencia sus credenciales medioambientales". <br />
<br />
Entre los encuestados que no han considerado vehículos de combustibles alternativos, los costos encabezaron la lista como el mayor obstáculo con 49%, seguidos por la dificultad de carga de combustible (48%) y la falta de elección de combustible (38%).<br />
<br />
Daniel Taylor además comentó: “En la actualidad, dado el alto costo de los vehículos de combustible alternativo, los incentivos serán un factor clave para una adopción generalizada. Sin embargo, el aumento de su producción debería abaratar costos y estimular a las empresas a expandir o reemplazar sus flotas cuando surgieran oportunidades.”<br />
<br />
El IBR reveló también que la confianza (88%) y seguridad (81%) siguen siendo factores clave a la hora de que los empresarios se decidan en la compra de autos para sus negocios, seguidos por los precios (77%) y el consumo de combustible (73%). Mientras tanto, solo 47% de las empresas mencionó el tipo de combustible como un factor clave a considerar.<br />
<br />
Daniel Taylor concluyó: “Los resultados sugieren un futuro brillante para la industria del vehículos de combustibles alternativos, siempre que puedan producirse vehículos que compitan con los ya existentes en términos de calidad, experiencia de manejo y fundamentalmente precios, al tiempo que ofrezcan ahorro de costos en términos de reabastecimiento de combustible".<br />
<br />
El informe completo de IBR 2012 puede descargarse aquí: www.internationalbusinessreport.com/Reports/2012/ </p>
El alto precio del petróleo lleva a considerar vehículos de combustibles alternativos
Una nueva investigación del International Business Report (IBR) de Grant Thornton reveló que alrededor de uno de cada cuatro empresarios ha introducido o está considerando la introducción de vehículos de combustible alternativo a su negocio, y que la mayoría lo hace en un intento de mitigar el precio del petróleo.