50 % de las empresas familiares están enfrentando en este momento un proceso de sucesión

Según revela un reciente estudio de la asociación civil CAPS.

21 julio, 2010

<p>CAPS (www.caps.org.ar), la primera entidad hispanoparlante consagrada al establecimiento, la pr&aacute;ctica y la difusi&oacute;n de la planificaci&oacute;n personal en todas sus ramas ha obtenido algunos datos relevantes en cuanto a la sucesi&oacute;n para las nuevas generaciones.</p>
<p>Los puntos de mayor relevancia son:<br />
<br />
– 50 % de las empresas deben afrontar en este trienio un proceso de sucesi&oacute;n. Teniendo en cuenta que la sucesi&oacute;n deber&iacute;a empezar a prepararse a partir de los 55 a&ntilde;os del o los titulares actuales, a lo que hay que sumar aquellas sucesiones que se deben iniciar como consecuencia del fallecimiento o la enfermedad grave de los socios actuales, sean de la edad que fueren.<br />
<br />
– Las mayores dificultades que enumeran los titulares de empresas a la hora de encarar una sucesi&oacute;n, se destacan (de mayor a menor indicencia):<br />
<br />
1.- P&eacute;sima relaci&oacute;n con alguna nuera<br />
2.- Alg&uacute;n hijo con relaci&oacute;n dificultosa con sus hermanos o sus padres<br />
3.- Alg&uacute;n hijo con poca afici&oacute;n por el trabajo.<br />
4.- Relaci&oacute;n hermana mayor / hermano menor.<br />
5.- Necesidad de proteger a alg&uacute;n hijo con discapacidad, o nietos menores.<br />
6.- Conflicto sucesorio por fallecimiento del hijo o hija, y deseo de favorecer a los otros hijos, en detrimento de los nietos que legalmente ser&iacute;an herederos, pero cuyo patrimonio es administrado por el viudo o viuda.<br />
7.- Conflicto matrimonial entre los propietarios, o alguno de sus hijos con su c&oacute;nyuge.<br />
8.- Mala relaci&oacute;n entre nueras.<br />
9.- Competencia entre padre que no quiere irse de la empresa, e hijo que quiere hacer las cosas seg&uacute;n su estilo.<br />
10.- Situaci&oacute;n de hermanos que se vienen &quot;tolerando&quot; desde hace muchos a&ntilde;os, pero que no se aceptan realmente para generar un proceso de cambio y mejora.<br />
11.- Drama del padre que quiere retirarse y ninguno de los hijos quiere tomar su lugar en la empresa.<br />
12.- Diferentes realidades econ&oacute;micas entre los integrantes de la empresa: uno necesita sacar mucho dinero para vivir, y a otro le alcanza con mucho menos, sea porque tiene menos exigencias familiares, o tiene un patrimonio que le da una renta mejor.<br />
<br />
– En 80 % de las empresas en primera generaci&oacute;n, la mujer del fundador tiene una particpaci&oacute;n activa. Generalmente, el espacio que ocupan tiene que ver con el manejo de la caja.<br />
<br />
– Ellas son las que motorizan la formaci&oacute;n de un plan sucesorio. Las mujeres suelen tener los ojos en el futuro y su mirada en la familia como n&uacute;cleo de continuidad hace que el tema les resulte especialmente importante.<br />
<br />
– En las actividades comerciales y de servicios la participaci&oacute;n femenina es m&aacute;s activa que en obra p&uacute;blica, o en industria pesada.<br />
<br />
– Su presencia ayuda, en general, a la mejor integraci&oacute;n de los j&oacute;venes.<br />
<br />
– Diferenciando la participaci&oacute;n de las mujeres en el negocio familiar desde el punto de vista geogr&aacute;fico, en el &Aacute;rea Metropolitana de Buenos Aires muchas de las que no trabajan en la empresa, desarrollan una actividad profesional independiente. En tanto en el interior, si no trabajan en la empresa,&nbsp;&nbsp; <br />
son amas de casa.<br />
&nbsp;</p>

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