El grupo planea desprenderse de 20,2%, esto es la mitad de su parte, que asciende
€ 4.000 millones (40,4% del paquete), colocándolo entre un grupo pequeño
de inversores y accionistas. A quienes adquieran estos papeles se les dará
opción para comprar el resto a fines de 2004.
Jean-René Fourtou, nuevo CEO del holding -censurado por sus vacilaciones-,
se comprometió en julio a recortar € 19.000 millones del pasivo y
ya ha vendido activos por unos 3.000 millones. En este momento, empero, está
abocado a una maniobra inversa: elevar la participación de VU en Cegetel,
para evitar que la británica Vodafone se quede con el mejor negocio
del grupo.
Hace un mes, Fourtou rechazó una oferta de Vodafone: € 6.800
millones por el 44% que Vivendi tiene en Cegetel. Ahora, los franceses
tienen hasta el 10 de diciembre para hacer una contraoferta… en efectivo. Ningún
analista se forja ilusiones al respecto y por lo menos dos temen que Vivendi
se extinga -tal como es hoy- antes de terminar 2003.
El grupo planea desprenderse de 20,2%, esto es la mitad de su parte, que asciende
€ 4.000 millones (40,4% del paquete), colocándolo entre un grupo pequeño
de inversores y accionistas. A quienes adquieran estos papeles se les dará
opción para comprar el resto a fines de 2004.
Jean-René Fourtou, nuevo CEO del holding -censurado por sus vacilaciones-,
se comprometió en julio a recortar € 19.000 millones del pasivo y
ya ha vendido activos por unos 3.000 millones. En este momento, empero, está
abocado a una maniobra inversa: elevar la participación de VU en Cegetel,
para evitar que la británica Vodafone se quede con el mejor negocio
del grupo.
Hace un mes, Fourtou rechazó una oferta de Vodafone: € 6.800
millones por el 44% que Vivendi tiene en Cegetel. Ahora, los franceses
tienen hasta el 10 de diciembre para hacer una contraoferta… en efectivo. Ningún
analista se forja ilusiones al respecto y por lo menos dos temen que Vivendi
se extinga -tal como es hoy- antes de terminar 2003.