El segundo anunciante mundial con su enorme presupuesto de marketing, advierte a las grandes empresas tecnológicas que considera retirar toda la publicidad digital a los gigantes online que “crean divisiones, alimentan odios, o fallan en proteger a las criaturas”.
En ese listado figuran, obviamente, Google y Facebook. La advertencia fue formulada por el CMO del gigante del consumo masivo, Keith Weed, durante la reunión anual del Interactive Advertising Bureau.
El presupuesto anual de Unilever es de US$ 7.700 millones (una cuarta parte se destina a medios digitales).
El mensaje fue claro: Unilever no puede seguir vinculado a estos medios cuando los consumidores desconfían o descreen de lo que ven o leen online. El mensaje llega justo cuando las Big Tech enfrentan una embestida en el mismo sentido, de distintas procedencias. Políticos, organismos reguladores, defensores de los consumidores, e incluso algunas voces del mundo tecnológico, reclaman que estos gigantes tengan mayor control sobre sus contenidos.
Temas como la presunta interferencia rusa en las elecciones de Estados Unidos y otros países; avisos que estimulan el odio y la violencia; o la investigación en torno a las consecuencias para la salud mental de los social media, están en el centro de la discusión.
La firma prometió seguir invirtiendo en publicidad online en medios responsables, que produzcan impacto positivo sobre la sociedad.
Antes que Unilever, su rival y principal anunciante mundial, Procter & Gamble, se había pronunciado en términos similares.
