Promoverán la producción eficiente de bioetanol mediante la circulación optimizada de hidrógeno, oxígeno y CO2.
En América Latina, Toyota Brasil lidera el desarrollo de nuevas tecnologías vinculadas a los biocombustibles: en 2019 lanzó el primer híbrido Flex de la historia.
En julio, Toyota anunció que su gama diésel en Europa Occidental será compatible con el combustible renovable HVO100, producido a partir de aceites vegetales.
Para cubrir las necesidades de distintas personas y regiones alrededor del mundo y al mismo tiempo alcanzar la neutralidad de carbono, es crucial ofrecer distintas opciones energéticas. El hidrógeno y los combustibles sintéticos a base de energías renovables, así como el bioetanol, que puede reducir las emisiones de CO2 a través de la fotosíntesis en las plantas, son opciones prometedoras. Su eficacia ha sido confirmada por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC). No obstante, es esencial clarificar inquietudes y encontrar soluciones para su implementación social en torno de las emisiones de CO2, los procesos de manufactura y la obtención de las materias primas para su producción.
Esta nueva asociación entre ENEOS, Suzuki, Subaru, Daihatsu, Toyota y Toyota Tsusho promueve la investigación tecnológica sobre el uso de la biomasa, así como la producción eficiente de bioetanol para desarrollar una nueva generación de combustibles para automóviles. El objetivo es alcanzar una sociedad neutra en carbono.
Las áreas de investigación son las siguientes:
(1) Sistemas eficientes de producción de etanol
Su objetivo es mejorar la tecnología de producción para que el combustible de bioetanol de segunda generación no compita con la alimentación. La Asociación construirá y explotará instalaciones de producción para detectar problemas, explorar soluciones y estudiar formas para mejorar la eficiencia.
(2) Oxígeno como subproducto y captura de CO2
La Asociación estudiará cómo aprovechar la alta concentración de oxígeno generado como subproducto durante la producción de hidrógeno, así como el CO2 generado durante la producción de bioetanol.
(3) Funcionamiento eficiente del sistema en su conjunto, incluido el aprovechamiento del combustible
Se analizarán los problemas asociados al uso de bioetanol como combustible para automóviles y otros vehículos. También se estudiarán fórmulas modelo para generar predicciones de los volúmenes de producción necesarios, tanto de materias primas de combustible.
(4) Métodos eficientes de producción de cultivos
La Asociación desarrollará un sistema que proponga métodos de cultivo para maximizar la producción y optimizar la composición de los cultivos para asegurar la disponibilidad de materias primas. Buscará mejorar la precisión de las producciones de las cosechas mediante estudios de la composición del suelo y otros métodos.
Toyota Brasil, pionera
En 2019, Toyota Brasil marcó un hito a nivel mundial con el lanzamiento del primer híbrido flex de la historia. Corolla Hybrid Flex combina un motor de combustión interna con un motor eléctrico. La diferencia con los híbridos convencionales es que ese motor térmico es capaz de utilizar tanto gasolina como bioetanol, generando un ahorro de emisiones de CO2 muy superior.
Brasil es uno de los países con mayor desarrollo en biocombustibles del mundo, gracias al aprovechamiento de la caña de azúcar. Además de generar empleo en la cadena de valor agroindustrial, este tipo de combustible tiene potencial para compensar y reabsorber las emisiones que se producen durante la conducción. A partir de la fotosíntesis, las plantas fijan carbono del ambiente, generando un ciclo virtuoso para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero: en comparación con la gasolina, las emisiones de CO2 son hasta un 90% más bajas.
En sus plantas de Indaiatuba y Sorocaba, Toyota Brasil produce Corolla y Corolla Cross Hybrid, los únicos híbridos fabricados en América Latina. Este es el origen de los híbridos que comercializa Toyota en Argentina, donde la marca lidera el mercado de vehículos electrificados con alrededor del 90% de las ventas.
HVO100 en Europa
En julio, Toyota Motor Europe (TME) anunció que su gama diésel será compatible con HVO100: Hydrotreated Vegetable Oil, o aceite vegetal hidrotratado, producido a partir de aceites de palma o colza y residuos reciclados como aceite de cocina usado.
Las Toyota Land Cruiser y Toyota Hilux que se fabricarán en Durban, Sudáfrica, a partir de 2023, serán capaces de utilizar el HVO100, que tiene un cetanaje superior (c80) que el gasoil estándar, así como un contenido inferior de azufre e hidrocarburos aromáticos.
Este cambio no afecta a la capacidad del vehículo de funcionar con diésel estándar: puede usar cualquiera de los dos combustibles de forma habitual. Con un ajuste del sistema de inyección, el uso de HVO100 produce un ligero incremento de la potencia máxima desarrollada por el motor.
Los surtidores de HVO100 son cada vez más habituales en las estaciones de servicio europeas, y hay ya alrededor de un millar en funcionamiento entre Bélgica, Dinamarca, Finlandia, Estonia, Letonia, Lituania, Holanda, Noruega y Suecia.
El aumento de la demanda genera la expectativa de alcanzar los 15,5 millones de toneladas anuales en 2030, respecto de los cerca de cuatro millones de toneladas que se producen en la actualidad.
Este tipo de combustibles, así como el bioetanol o los combustibles sintéticos son claves en el camino de Toyota para reducir las emisiones de la movilidad y en el desafío de alcanzar la neutralidad de carbono antes de 2050.