La fase pública del pleito comenzó el martes y algunos observadores especializados en el negocio subrayan algo curioso: no se ve reacción en una industria habituada a manipular la opinión pública vía publicidad, relaciones públicas e informes supuestamente científicos. Fuera de Estados Unidos, por supuesto, la influencia de las dos grandes restringe la información acerca del juicio.
El proceso se ventila ante un tribunal del distrito federal. La principal acusada es Altria (Philip Morris), que controla casi 50% del mercado norteamericano y es la única que dio ganancias en 2003 (US$ 9.200 millones). La siguen RJR –perdió US$ 3.450 millones-, Vector Group (LM, con 15.500.000 en rojo), Brown & Williamson (British American Tobacco) y Carolina (Lorillard).
La causa implica trescientos testigos y durará veinticuatro semanas. Esta prima instancia representa la culminación de investigaciones y acciones iniciadas en la demanda original, 1999.
Aparte de engañar al público, se responsabiliza a las compañías de promover campañas orientadas a estimular el cigarrillo entre adolescentes, vía dibujos animados. También entra en la causa la publicidad que vincula deportes con el tabaco (LM, Camel).
La fase pública del pleito comenzó el martes y algunos observadores especializados en el negocio subrayan algo curioso: no se ve reacción en una industria habituada a manipular la opinión pública vía publicidad, relaciones públicas e informes supuestamente científicos. Fuera de Estados Unidos, por supuesto, la influencia de las dos grandes restringe la información acerca del juicio.
El proceso se ventila ante un tribunal del distrito federal. La principal acusada es Altria (Philip Morris), que controla casi 50% del mercado norteamericano y es la única que dio ganancias en 2003 (US$ 9.200 millones). La siguen RJR –perdió US$ 3.450 millones-, Vector Group (LM, con 15.500.000 en rojo), Brown & Williamson (British American Tobacco) y Carolina (Lorillard).
La causa implica trescientos testigos y durará veinticuatro semanas. Esta prima instancia representa la culminación de investigaciones y acciones iniciadas en la demanda original, 1999.
Aparte de engañar al público, se responsabiliza a las compañías de promover campañas orientadas a estimular el cigarrillo entre adolescentes, vía dibujos animados. También entra en la causa la publicidad que vincula deportes con el tabaco (LM, Camel).