Superdry, marca internacional de indumentaria fundada en el Reino Unido, anunció su desembarco en Argentina como parte de una estrategia regional en Latinoamérica. El proyecto, que se desarrollará en alianza con la empresa argentina Tango Fabric, contempla una inversión estimada de entre US$ 40 y 50 millones en los primeros cuatro años y tiene como horizonte un plan de expansión a 20 años.
La apertura de la primera tienda propia, denominada flagship store, está prevista para agosto de 2026 en Buenos Aires. Esta ubicación funcionará como sede regional y centro de decisiones para Sudamérica. El inicio de operaciones incluirá la creación de 150 puestos de trabajo directos en la etapa inicial, según informó la compañía.
A partir de 2027, Superdry proyecta extender su presencia hacia siete mercados estratégicos: Brasil, Uruguay, Paraguay, Bolivia, Chile, Ecuador y Perú. El modelo de crecimiento contempla la franquicia en todos los territorios y un ritmo de diez aperturas anuales en la región. El bloque económico seleccionado representa el cuarto mayor a nivel mundial en términos de producto bruto interno (PBI).
En materia tecnológica, el desarrollo local incorporará el sistema de planificación de recursos empresariales (ERP) utilizado en Europa y tecnología RFID (identificación por radiofrecuencia) en todas sus tiendas. Esta implementación apunta a optimizar la eficiencia logística, el control de inventario y la experiencia de compra omnicanal.
La elección de Argentina como punto de partida responde tanto a la tradición en consumo de moda como a su rol estratégico como centro operativo regional. “En términos de posicionamiento, la marca apunta a ocupar un lugar diferencial en el mercado, ofreciendo una alternativa concreta frente a una oferta local muchas veces limitada. La propuesta está diseñada para el consumidor argentino que busca calidad real a precios razonables”, afirmó Juan Ignacio Tubio Monaco, co-CEO de Superdry Latinoamérica.
“Nuestro objetivo es que el consumidor pueda acceder a estándares internacionales sin pagar sobreprecios desalineados del valor real, con una operación local eficiente y una experiencia de marca a la altura de lo que la gente espera”, agregó Ezequiel García, co-CEO de Superdry Latinoamérica.












