La demanda norteamericana de vehículos Chrysler cedió 7,7% entre enero y noviembre y queda bajo Toyota Motor es ese mercado. Desde ahora, ventas y marketing de la marca queda a las órdenes de Tommaso LaSorda, director ejecutivo de Chysler Group
“Necesitan con urgencia un jefe firmes y eso no se ve en la empresa”, sostiene Thomas Baremboim, dueño de la mayor concesionaria Chrysler Jeep en Massachusetts. “Con todo respecto a Eberhardt, era hora de hacer cambios”. Otros concesionarios grandes tampoco le ven a LaSorda uñas para guitarrero.
Las presiones para recobrar ventas empezaron a aumentar desde que el tercer trimestre cerró con US$ 1.500 de pérdida neta. Fue el primer déficit desde abril-junio de 2002. La razón es tan clara como en General Motors y Ford: la gama de vehículos sigue dominada por camionetas, rurales y “utilitarios deportivos”.
“Cualquiera sabe que el público ya no quiere esos modelos. Eso provoca problemas internos en Chrysler”, señala Automotive Consulting Group. “Crecen presiones para que un ejecutivo tenga rápidamente éxito. Si no, lo echan”. Eberhardt, de aenas 43 años, ostentaba un título largo desde 2003: “vicepresidente ejecutivo para ventas y marketing global”. Le iba grande- Hoy vuelve a su antigua actividad: una conmcesionaria Mercedes en Estados Unidos. Por delicadeza, nadie informó dónde se ubican sus salones.
Mientras Daimler-Benz lograba elevar 15% las ventas totales, su filial Chrysler Group apenas las aumentaba 2,9% en noviembre. A pesar de eso, su porción del mercado local declinaba de 13,6% en octubre a 12,9% el mes pasado.
La demanda norteamericana de vehículos Chrysler cedió 7,7% entre enero y noviembre y queda bajo Toyota Motor es ese mercado. Desde ahora, ventas y marketing de la marca queda a las órdenes de Tommaso LaSorda, director ejecutivo de Chysler Group
“Necesitan con urgencia un jefe firmes y eso no se ve en la empresa”, sostiene Thomas Baremboim, dueño de la mayor concesionaria Chrysler Jeep en Massachusetts. “Con todo respecto a Eberhardt, era hora de hacer cambios”. Otros concesionarios grandes tampoco le ven a LaSorda uñas para guitarrero.
Las presiones para recobrar ventas empezaron a aumentar desde que el tercer trimestre cerró con US$ 1.500 de pérdida neta. Fue el primer déficit desde abril-junio de 2002. La razón es tan clara como en General Motors y Ford: la gama de vehículos sigue dominada por camionetas, rurales y “utilitarios deportivos”.
“Cualquiera sabe que el público ya no quiere esos modelos. Eso provoca problemas internos en Chrysler”, señala Automotive Consulting Group. “Crecen presiones para que un ejecutivo tenga rápidamente éxito. Si no, lo echan”. Eberhardt, de aenas 43 años, ostentaba un título largo desde 2003: “vicepresidente ejecutivo para ventas y marketing global”. Le iba grande- Hoy vuelve a su antigua actividad: una conmcesionaria Mercedes en Estados Unidos. Por delicadeza, nadie informó dónde se ubican sus salones.
Mientras Daimler-Benz lograba elevar 15% las ventas totales, su filial Chrysler Group apenas las aumentaba 2,9% en noviembre. A pesar de eso, su porción del mercado local declinaba de 13,6% en octubre a 12,9% el mes pasado.