Amazon es un vendedor gigantesco con inmensos galpones muy automatizados. En la actualidad la gran mayoría de los productos que vende son de terceros. Esos productos llegan con códigos y precios marcados que deben ser borrados y reemplazados.
Eso dio origen a un negocio fenomenal: los centros especiales de preparación de paquetes.
Infinidad de artículos de Walmart, Targets y de tiendas de todo el país llegan a diario a Roundup, un pueblo perdido en el estado de Montana donde serán sacados de sus cajas, acomodados en otras y enviados a Amazon. Pueblo de cowboys fundado en el siglo 19, tiene hoy una población de apenas 2.000 habitantes. Sin embargo, y aunque no haya allí presencia oficial de Amazon, En Roundup hay un gran negocio de centros de preparación, o sea lugares que se especializan en empacar productos para que cumplan con los exigentes requisitos de los depósitos altamente automatizados de Amazon.
Para que los robots que manipula en los inmensos centros de procesamiento de Amazon los productos de terceras marcas previamente hay que eliminarles viejos códigos de barra o precios y agregarle nuevos. Los objetos de vidrio deben envolverse en plástico de globitos, los objetos sueltos deben colocarse en bolsas
Kristal Graham inició el negocio en 2015, primero en su casa, luego en su garaje. Más tarde alquiló un galpón. Primero tuvo 10 empleadas, después 20, todas mujeres.
Hoy los centros de preparación proliferaron en Roundup y forman parte del inmenso universo que contribuye a llenar las estanterías de los grandes depósitos.
