(EFE).- El fabricante automovilístico japonés Mitsubishi Motors sufrió el pasado año unas pérdidas netas consolidadas de alrededor de US$ 2.243 millones, a causa de la revisión y reparaciones de miles de vehículos con defectos.
A los números rojos de Mitsubishi hay que añadir la pérdida que ya se anotó el ejercicio de 1999, que fue de US$ 188 millones.
La facturación del grupo bajó 1,7% hasta US$ 26.370 millones presionada por la debilidad del mercado japonés, en el que Mitsubishi vendió 3,6% menos (1,44 millones de vehículos).
Además, la empresa anotó pérdidas extraordinarias debido a la reorganización que se vio obligada a efectuar para hacer frente a la crisis de la revisión de centenares de miles de vehículos cuyos defectos de fabricación ocultó en los últimos 30 años.
La empresa dijo que no abonará dividendos a sus accionistas por el ejercicio fiscal de 2000, que finalizó el 31 de marzo pasado.
(EFE).- El fabricante automovilístico japonés Mitsubishi Motors sufrió el pasado año unas pérdidas netas consolidadas de alrededor de US$ 2.243 millones, a causa de la revisión y reparaciones de miles de vehículos con defectos.
A los números rojos de Mitsubishi hay que añadir la pérdida que ya se anotó el ejercicio de 1999, que fue de US$ 188 millones.
La facturación del grupo bajó 1,7% hasta US$ 26.370 millones presionada por la debilidad del mercado japonés, en el que Mitsubishi vendió 3,6% menos (1,44 millones de vehículos).
Además, la empresa anotó pérdidas extraordinarias debido a la reorganización que se vio obligada a efectuar para hacer frente a la crisis de la revisión de centenares de miles de vehículos cuyos defectos de fabricación ocultó en los últimos 30 años.
La empresa dijo que no abonará dividendos a sus accionistas por el ejercicio fiscal de 2000, que finalizó el 31 de marzo pasado.