La Competition and Markets Authority (CMA) multó a la farmacéutica norteamericana por disparar a las nubes el precio que cobra por una imprescindible droga para los epilépticos.
Es la multa más grande que ha impuesto jamás esa institución. La defensa de Pfizer es que continuó produciendo el Epanutin, aunque generaba pérdidas, porque sabía que 48.000 británicos dependían de una fórmula exacta para controlar las convulsiones. Cuando se le expiró la patente, vendió los derechos de distribución aFlynn Pharmafrom Stevenage, que comercializó la droga como phenytoin sodium. Ese cambio liberó los topes de precio acoerdados con el NHS (Servicio Nacional de Salud británico) lo cual permitió a Pfizer y Flynn a cobrar más.
Pero la CMA rechaza la explicación porque el precio del phenytoin subió más de 2.000% de la noche a la mañana. Phyzer habría recuperado las pérdidas en dos meses.
Pfizer y Flynn han dicho que apelarán, aunque no multa es insignificante para la empresa norteamericana. A otras compañías las han multado por mucho más. Pero para la CMA es importante. La autoridad está decidida a dominar a los grupos que encuentran truquitos para burlar el sistema.