<p>Eastman Kodak Co., la compañía que nació en Estados Unidos hace 131 años, perdió ante rivales digitales el negocio de los rollos fotográficos y no tuvo éxito en el terreno de las cámaras digitales. Actualmente se mueve en el terreno de las impresoras y cartuchos de tinta, pero lleva varios trimestres registrando pérdidas. Su deuda recibió la calificación de basura con vencimiento dentro de dos años Rivales acabaron con gran parte del negocio de rollos fotográficos de la compañía estadounidense de 131 años, que luego no supo hacer la transición a las cámaras digitales. Ahora, en un esfuerzo por reinventarse como una empresa que vende impresoras y tinta, se está quedando sin efectivo.<br />
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Kodak acumula cinco trimestres consecutivos de pérdidas. Su deuda mereció la calificación de "basura y sus acciones cotizan a US$3. El mercado ve riesgo de cese de pagos. El banco de inversión Lazard Ltd. ya empezó a contactar a potenciales interesados.<br />
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A fines de julio apareció una firma de inversión con interés en comprar una participación. Convocada por el presidente Antonio Pérez, la junta directiva se reunió y decidió que impedirían una compra hostil. Algunos ex ejecutivos afirman que tal vez habría sido mejor dividir la empresa y venderla por partes. Pérez y Rick Braddock, presidente del directorio, no coinciden. Este último opina que la partición no concuerda con la decisión de la empresa de reinventarse. <br />
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Pérez afirmó que mantiene su confianza en el plan de transición. Destacó que Kodak cerrará el año con al menos US$1.600 millones en efectivo, por encima de los US$ 957 millones de la actualidad, debido a que espera que los ingresos por derechos de propiedad intelectual, venta de activos —que podrían incluir patentes— y ventas de productos repunten en el segundo semestre.<br />
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<p><strong>El negocio de las impresoras</strong></p>
<p>Kodak empezó a vender impresoras en 2007. Su estrategia fue venderlas más caras, pero con cartuchos más baratos. Según el IDC, en 2010 poseía 3% del mercado mundial de impresoras de inyección de tinta (1% en 2008). <br />
La junta directiva respalda a Pérez y su estrategia. En septiembre de 2009, lo disuadió de que se retirase y renovó su contrato hasta 2013. <br />
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Durante generaciones, Kodak prosperó con los rollos de fotos. Sus rollos y cámaras, a precios módicos, hicieron que la fotografía dejase de ser una práctica para entendidos. En los 80 comenzaron los problemas con la aparición de rivales y de tecnologías digitales. Kodak asegura que inventó la primera cámara digital del mundo en 1975 y que gastó cientos de millones de dólares en tecnología digital. Pero el miedo de canibalizar sus ventas de películas paralizó a la compañía cuando llegó el momento de salir al mercado. <br />
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Los problemas de Kodak se reflejan en el número de empleados. En 2004, tenía una fuerza laboral mundial de 54.800 personas. En 2010, eran 18.800. <br />
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Pérez llegó a Kodak en 2003 con tres objetivos: reducir el negocio de rollos de fotografías, crear una nueva empresa digital y administrar los costos de seguro médico y pensiones de los jubilados. Cada proceso es extremadamente caro. La empresa afirma que solamente la reestructuración de las películas costó US$3.400 millones a lo largo de cuatro años, y sus operaciones no generan suficiente efectivo para cubrir todos los gastos.<br />
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La empresa tiene registradas más de 11.000 patentes y obtuvo US$1.900 millones entre 2008 y 2010 por licencias y demandas por propiedad intelectual. Ahora le queda la posibilidad de vender patentes y hasta vender o alquilar parte del espacio de Kodak Park, su mayor centro manufacturero en Rochester.<br />
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El futuro de la empresa está fundamentalmente en la impresión. Aun así, hay dudas de que Kodak logre su objetivo de equiparar ingresos y costos en el ejercicio de este año. Además, la fuerte competencia ha reducido los precios de las impresoras, lo que complica aun más la rentabilidad. <br />
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