“Las principales tendencias en auditoría para 2025 están marcadas por dos grandes esferas. Por un lado, la calidad de las auditorías. Por el otro, la automatización. Esto implica el uso de inteligencia artificial y la incorporación de análisis de datos avanzados, para lo que se va a requerir un conocimiento en otras disciplinas, como la minería de datos para analizar grandes cantidades de información en busca de patrones, tendencias y correlaciones, y así poder predecir resultados y analizar su razonabilidad”, indica Juan José López Forastier, socio de Russell Bedford Argentina. “También se observa un aumento en la regulación y el cumplimiento normativo, en particular en las exigencias relativas a la calidad de las auditorías que exige a las firmas una mayor de especialización y adaptación. En cuanto a las oportunidades y retos más destacables de hoy, la digitalización y el enfoque en ESG abren nuevas áreas de servicio. Sin embargo, el desafío sigue siendo atraer y -sobre todo- retener el talento calificado en un entorno dinámico en constante evolución”, reconoce.
¿Cómo pueden las auditorías contribuir a que una empresa obtenga mayor acceso a financiación o inversión?
En Argentina, al ser obligatorias las auditorías contables para todas las sociedades, el contar con información auditada no pareciera ser un punto relevante a la hora de lograr mayor financiamiento. Sin embargo, hemos comenzado a observar que el mercado empieza a demandar auditorías de mayor calidad y que los auditores puedan demostrar que realizan el trabajo con altos estándares. Esto proporciona una evaluación independiente de la salud financiera de la empresa, lo que aumenta la transparencia y la confianza entre los posibles inversores y prestamistas. De este modo, se presentan estados financieros confiables, que fueron desarrollados por profesionales que pueden demostrar altos estándares de calidad, y eso indirectamente representa que los auditados respetan las normas legales y regulatorias, reduciendo los riesgos para los inversores. Al mismo tiempo siguen siendo importantes las recomendaciones de mejora que puede dar la visión independiente del auditor, y que redunda en la gestión financiera, ayudando a la empresa a mitigar riesgos y tomar mejores decisiones de financiamiento.
Un enfoque personalizado
¿Cómo pueden las consultoras aprovechar la creciente necesidad de asesoría para digitalización por parte de las pymes?
En el ámbito de la consultoría, la transformación digital es una prioridad para todos, pero creo que en particular para las pymes porque los acerca a nuevos clientes y mercados de manera casi instantánea. Las firmas pueden capitalizar esta necesidad ofreciendo soluciones integrales que incluyan planificación estratégica, implementación de tecnologías y capacitación. La clave es adoptar un enfoque personalizado, combinando conocimientos técnicos con acompañamiento en la gestión del cambio. Asimismo, la optimización de procesos mediante herramientas de inteligencia de negocios representa áreas de alto impacto, que cada vez se encuentran de manera más económica y amigable en el mercado.
¿Cuáles son las principales oportunidades que identifica para el sector de la consultoría y qué se necesita para poder aprovecharlas?
El sector de la consultoría está en constante evolución y presenta diversas oportunidades, como la transformación digital, la sostenibilidad y la responsabilidad social. Por ejemplo, al digitalizarse, las organizaciones se encuentran más expuestas a riesgos que antes se cubrían de forma física, y hoy hay que corregirlos mediante ciberseguridad. Por otro lado, si bien se ha avanzado en el análisis de datos y business intelligence, todavía queda mucho campo por desarrollar, ya que las herramientas para el manejo de los datos siguen siendo algo complejas para los usuarios finales y en consecuencia existe un mercado muy interesante para trabajar. Aprovechar estas oportunidades requiere de una combinación de habilidades técnicas, conocimiento del mercado, y una mentalidad proactiva, pero sobre todo de talentos.
