<p>Quienes investigan la caída multimillonaria de JP Morgan Chase cuentan ahora con otros datos para ir contra los cuatro acusados de tráfico de influencias. Se trata de grabaciones de conversaciones telefónicas en las que los ex empleados hablaban abiertamente de cómo manipular las acciones más riesgosas de manera favorable.</p>
<p>Se trata de cuatro ex empleados de la filial de Londres que serían responsables de la pérdida de US$ 6.000 millones en mayo último. En relación a este caso el FBI podría comenzar a realizar arrestos en los próximos meses.</p>
<p>Las conversaciones telefónicas grabadas fueron entregadas a la policía por la empresa que está colaborando con la investigación. Las autoridades ahora deben escuchar y analizar cientos de conversaciones en inglés y en francés. También analizarán las notas que algunos empleados tomaron durante reuniones, los mensajes de chat que circulaban entre empleados y los emails internos.</p>
<p>Básicamente lo que quieren probar es que algunos empleados influenciaron los precios del mercado para sacar provecho de las caídas. También quieren determinar si se falsificaron documentos para ocultar estas cuestiones de los ejecutivos en Nueva York. Basándose en esa información JP Morgan dio información falsa a los reguladores.</p>
<p>La hipotesis de los investigadores, por lo pronto, es que los problemas fueron causados por un grupo aislado de ejecutivos de oficinas extranjeras y no en la estructura interna de la casa matriz. Podrían ser buenas noticias para el CEO de JP Morgan Chase, Jamie Dimon.</p>
<p>Luego de cinco meses de investigaciones la atención de las autoridades se focalizó en cuatro individuos de la oficina de Londres: Javier Martin-Artajo, Bruno Iksil, Achilles Macris y Julien Grout. Sin embargo, la investigación todavía está en la primera etapa y será difícil probar las acusaciones en los tribunales. Es complejo para los fiscales explicar cuestiones financieras complejas a los integrantes de un jurado. Además, como algunos de los acusados son franceses, la extradición sería imposible. Mientras tanto, la empresa sigue bajo presión de varios entes reguladores para ver si engaño o no a los inversionistas sobre la severidad de las perdidas.</p>
Grabaciones telefónicas complican a acusados de JPMorgan
Las autoridades estarían utilizando grabaciones de conversaciones telefónicas que complicarían aún más a los cuatro acusados de tráfico de influencias en relación a la caída multimillonaria que sufrió JP Morgan Chase en mayo.