En la última reunión anual de accionistas, la votación terminó con el voto de 25% de las acciones a favor de la separación de cargos, que actualmente ejerce Jeff Immelt.
La necesidad de separara los dos cargos más encumbrados de una organización cobró impulso luego de la crisis financiera de 2008 como una forma de lograr mayor control en el accionar contable de las compañías. Más atrás, la ley Sarbanes-Oxley de 2002 también reclama mayor independencia de los directorios.
Según explica la AFSCME, GE necesita un presidente de directorio que sea independiente para poder evaluar y limitar los poderes del CEO y llevar la contabilidad de los ejecutivos.
El actual consejo directivo de GE argumentó que su actual sistema funciona bien tal como está.
La AFSCME impulsa una medida similar en JPMorgan Chase & Co, que será considerada por los accionistas en su reunión anual el mes que viene.